Supongamos, es lo que parece, que la Sra. decide definitivamente no presentarse. Lo que queda son pigmeos, yo me acuerdo cuando Néstor Kirchner se presentó como candidato, para ese entonces había al menos otro candidato que lo igualaba en trayectoria, era De la Sota, incluso hasta el final se discutía si D*halde no iba a presentarse. Me van a decir que D*halde o De la Sota eran dos pigmeos, bueno, comparados con Wado, con Rossi, con Grabois o con el propio Massita eran dos gigantes, D*halde había sido vice de M*nem, gobernador de la PBA, presidente interino, o como carajo se diga, en el 2002. De la Sota había tallado fuerte en el PJ y había sido gobernador de Córdoba. El peronismo ha estado históricamente repleto de figuras cuestionables y derechosas, sin embargo eran tipos que tenían una trayectoria, por lo menos habían gobernado una provincia y habían quedado bien, el turco puto (M*nem) sin ir más lejos, todavía es recordado como un estadista en La Rioja. Aunque eso no nos guste. Vas a gobernar nuestro país que, más allá del patrioterismo es un gigante, sin haber manejado, que más no sea una provincia chica ¿el ejemplo de Alberto no les alcanzó? Es cierto que nos vamos a joder menos si gana un peronista, cualquiera, que la derecha que promete hacernos cagar a todos pero ¿hasta dónde se puede seguir así? La pregunta es de qué carajo nos disfrazamos una vez que el gobierno peronista caiga aplastado por una corrida o por un golpe institucional o por otro mecanismo más o menos impredecible. A lo mejor los sabios de la economía que manejan, no sé, datos y métodos estadísticos superiores, nos dicen que tal o cual sector van recontra bien, no lo sé. Lo único que sé es que, además de la inflación espiralizada estamos en recesión. No conozco a nadie que no esté achicando los gastos, que no gane menos ahora que hace 6 meses. Ahora, ante eso vas a poner de presidente a un tipo que no gobernó ni un kiosco. A lo mejor soy yo pero me parece una tremenda, obvia, incuestionable pelotudez. Es mejor que Cristina sea candidata, aun perdiendo la elección, 1ero porque aun perdiendo va a medir superbién. No es lo mismo perder por un par de puntos que salir 3ero. 2do porque haciendo una buena elección va a mantener la unidad, el peso y un montón de poder territorial. Con Massita de candidato esto se rompe, por más miedo que dé la derecha el tipo no tiene nada que prometer, peor aún, las cosas van de mal en peor, se rompe porque hay mucha gente que no va a aceptar la falta de una alternativa, ya pasó en la elección del 2021, nuestra gente se quedó en su casa. No hay ningún motivo para que ese escenario no vuelva repetirse. Si Massita, de todas las locuras posibles, tiene algo nuevo o, por lo menos, viable para ofrecer, debería llevarlo adelante ahora mismo, ya, en los meses que quedan. Dentro de 2 o 3 años es muy probable que nuestro país pudiera, por ejemplo, autoabastecerse de energía y cosas por el estilo, para empezar si tiene tal o cual recurso y la relación de fuerza no cambia vamos a estar como ahora, 2do que carajo se necesitan algunas respuestas ahora, los sectores más empobrecidos no pueden esperar 2 años para comer, incluso la clase media no puede pasar años esperando cierta estabilidad y un mínimo de decoro. También se habla de Scioli, si no pudo ganar una elección en el 2015 con el país próspero ¿la va a ganar ahora con el país fundido? En definitiva si vamos a tener una elección para que siga el albertismo es muy difícil encontrarle la gracia, además de que va a ser un milagro llevar a la gente a votar por seguir así. Es más, es bastante probable que la derecha termine gobernando igual. Si la candidata es Cristina hay que enfrentar la proscripción, lo que lleva a un combate directo. Cosa que tarde o temprano va a tener que ocurrir. No veo motivo para creer que dentro de unos meses o unos años las chances de éxito vayan a ser mejores que las de ahora. Salvo por la doctrina troskoide de que cuando toquemos fondo, con ajuste, hambre y represión va a venir, no sé, una insurrección y todos vamos a ser felices. |
Un amigo peronista me decía que el movimiento iba a sacar, como hace siempre, un conejo de la galera, yo veo cada vez menos galeras y ni hablar de los conejos.