La disparatada aventura bolchevique continúa. La revolución de 1905 avanzó hasta donde pudo. Esta vez el padrecito del pueblo, el Zar, aplasta a sus perversos enemigos. Y se lleva todos los aplausos.
La Rusia feliz de antes.
Los populistas y los socialdemócratas.
La revolución de 1905.
1906
Junto con la, breve, primavera democrática hicieron su aparición partidos orgánicos de la extrema derecha, siendo el más conocido el grupo “Unión del Pueblo Ruso” que contaba con la simpatía del Zar, un divino él, y la de los jerarcas de la iglesia. No se olviden de esto último cuando lean que los bolcheviques, esos sicarios del mal, demolían iglesias. Los paramilitares financiados, como siempre, por los ministros del Zar eran las “centurias negras”. El nombre es un chiste de la izquierda porque “centurias blancas” eran, en 1700, la denominación de los nobles. Algo así como que se las daban de nobles y eran unos negros de mierda. Para 1906 las centurias tenían como 300 mil miembros unas 10 veces más que mencheviques y bolcheviques sumados. Las centurias son un antecedente del ejército blanco y de los partidos fascistas que estuvieron de moda en Europa durante el siglo XX, y ahora están volviendo. Durante las primeras semanas después del manifiesto de octubre mataron en diversos pogromos a más de mil judíos. Los militantes de las centurias son pequeño burgueses, pequeños propietarios, tenderos, especuladores varios, en muchos casos lisa y llanamente delincuentes, asustados por los cambios.
No recuerdo haber leído si los bolcheviques u otros grupos usaban el giro “ejército de ocupación” pero a partir de diciembre de 1905 alrededor de 15 mil militantes políticos fueron condenados a muerte, 20 mil fueron muertos o baleados y cerca de 20 mil fueron condenados al exilio. Los soldados cosacos, munidos de doble ración de vodka invadieron las aldeas rebeldes y organizaron una orgía de linchamientos y violaciones.
Aun así aclaremos que para un latinoamericano el trato que el Zar daba en las cárceles parecía a veces como una colonia de vacaciones. Es que el mundo avanza y cada vez hay que golpear más duro.
Muchos nobles abandonaron sus mansiones, o lo que quedaba de ellas, en el campo y los que permanecieron se consiguieron armas, soldados y candados para defender su propiedad.
Los antiguos progresistas descubrieron que los jóvenes de clase baja eran delincuentes, que los pobres eran promiscuos. La beneficencia fue reemplazada por el pedido de más policías y más represión. Las señoras mayores de clase media miraban TN y se negaban a salir a la calle.
En febrero de 1906 el partido Cadete, liberal, condenó las huelgas, las insurrecciones y las tomas de terreno. Hay cosas con las que no se jode.
Y, atención con esta, aparecieron grupos de intelectuales, algunos de los cuales habían participado de la rebelión, para criticar a los revolucionarios y a la revolución para, en vez de la rebeldía, enseñar al pueblo a respetar la Ley.
El coqueteo con el marxismo se terminó y de nuevo volvieron las preocupaciones con la moral y el espíritu, se pusieron de moda filosofías esotéricas, descubrieron que “el hombre es perverso por naturaleza” y que el mundo se iba a acabar pronto. Estaban en lo cierto en este último punto.
Para abril de 1906 se reunió el primer parlamento ruso. Los campesinos, que siempre votaron a los Socialistas Revolucionarios incluso cuando ya habían dejado de existir en 1918, no pudieron votar a los SR porque estos, al igual que sus primos bolcheviques y mencheviques, decidieron boicotear las elecciones, de modo que votaron, eran unos 100, a un grupo llamado “trudovique”, la mayoría de la cámara era del partido demócrata constitucionalista, Cadete (liberal) con 179 escaños sobre 478.
El Zar detentaba el poder más o menos como antes, el parlamento era puramente consultivo y, muchas veces, ni siquiera eso, el Zar podía disolverlo cuando quisiera y es lo que hizo con los dos primeros parlamentos que no le gustaron. Podía gobernar por decreto, declarar la guerra y lo que se le cantara el culo. También crearon el “consejo de estado” que era una payasada similar a la cámara de los lores.
Dos temas ocuparon la atención del novel parlamento, la primera era una amnistía para los presos políticos y la otra era una reforma agraria. Durante los grandes despelotes de 1905 muchos agrogarcas (adoptamos la taxonomía barcelonesa) habían pensado en entregar una parte de sus tierras con tal de que los campesinos los dejasen en paz pero para mediados de 1906 el Zar estaba firme en el trono y la idea de dejarles tierra a los pobretones volvió a sonarles disparatada.
Incluso al Zar se le conoce una frase macrista: “Lo que les pertenece a los terratenientes les pertenece”.
En julio el primer parlamento fue disuelto. Y con eso se termina la etapa “rebelde” del liberalismo. Como si dijéramos la semana santa de Alfonsin.
En abril Rusia recibe el préstamo más grande de su historia.
Se creía que la “opinión liberal” europea disponía a de una herramienta fundamental para controlar al monarca, era la deuda externa. Rusia estaba en la ruina después de un año de guerra y de rebelión y dependía del crédito de los franceses. El control que hicieron los aliados europeos de la política del Zar es similar al que hicieron respecto de las dictaduras latinoamericanas de los 70. Alentaron más dictadura y más represión.
Quedaba, sin embargo, aun un parlamento. Los diputados campesinos, llegados de regiones de Rusia y alrededores más medievales que Petrogrado mismo, se emborrachaban en los boliches y terminaban metidos en peleas. La cámara, dominada por los liberales Cadetes, se convirtió en una tribuna de denuncia de los abusos del Zar. Los discursos atrevidos y las acciones armadas de los SR no cesaban.
El 8 de julio el parlamento fue disuelto. Había durado 70 días.
Ante el cierre del parlamento los liberales indignados llamaron a derrocar al gobierno pero nadie les hizo caso. 100 de los principales líderes liberales fueron enjuiciados. Los Cadetes nunca más volvieron a ser tan liberales como esa vez.
Después de julio el hombre fuerte de Rusia es un tal Stolypin. Pertenecía este señor a la antigua nobleza. Había hecho sus primeros pasos en la administración zarista en la parte occidental del imperio, cerca de la frontera con Alemania, donde no existía la comuna rural sino propietarios individuales al estilo europeo. De ahí le había tocado la región de Saratov donde los campesinos se habían sublevado. La actitud de Stolypin no fue la que asumieron otros señores del campo que se escondieron en sus mansiones, enfrentó la rebelión con brutalidad pero también haciendo concesiones y, esto tiene importancia, dando la cara. Europa occidental, antes del fiasco de la unión europea, también se construyó con reformas para impedir la revolución. Cientos de publicaciones fueron prohibidas, más de 60 mil presos políticos fueron ejecutados, condenados a trabajos forzados o exilados sin juicio previo en los 3 primeros años de Stolypin como primer ministro. Hubo cambios progresistas en algunas áreas pero las reformas apuntaban a destruir la comuna rural. La izquierda, entre ellos Lenin, creía que era posible que Stolypin tuviera éxito y que la comuna fuera reemplazada por pequeños propietarios reaccionarios como si dijéramos la patria sojera.
El proceso que había convertido a los campesinos feudales en pequeños propietarios había durado cientos de años, había costado más víctimas que todas las guerras mundiales juntas y había estado relacionado con las conquistas en el tercer mundo. Aunque los campesinos vivían en la miseria, al filo de la inanición, la comuna ajustaba la cantidad de tierra según la familia y le daba a las familias alguna clase de contención. Viéndolo físicamente una familia de pequeños campesinos a la europea hubiera necesitado 4 o 5 veces más terreno que una familia de la comuna y hubiese necesitado equipamiento y caminos y medios de transporte. Piensen que los pequeños/medianos campesinos argentinos, donde, salvo los indígenas, nunca hubo comuna rural, no se convirtieron en agrogarcas hasta los últimos 10-15 años.
No solamente eso los señores del campo ganaban con la comuna, arrendaban terrenos, tenían mano de obra barata. Eso sin olvidar que de nada vale ser rico si no hay pobres a los que uno pueda sentirse superior.
Mientras las "centurias negras", la versión rusa de la triple A, matan políticos del partido Cadete, liberales, el jefe de los liberales Miliukov se reúne con Stolypin.
1907
En febrero de 1907 se votó el segundo parlamento. El grupo de izquierda formado por mencheviques, bolcheviques, SR, Socialistas Populares y trudoviques conquistó 222 escaños y tenía mayoría. Pero Stolypin no se amilanó, disolvió el parlamento y cambió la legislación electoral para que votara aun menos gente que antes. Y listo, se terminó el problema. Acuérdense porque esto es lo que hacen los enamorados de la ley y la constitución. Los diputados socialdemócratas van todos en cana.
Para junio de 1907 se puede decir que en las grandes ciudades los socialdemócratas, ya sean mencheviques o bolcheviques, han sido borrados del mapa.
Pero en las regiones del sur las cosas son diferentes.
El 25 de agosto los Maximalistas, una rama del SR fanáticos del Maxi López (¿Por qué no?), le vuela la casa a Stolypin matando 30 personas. Para el 1ro de septiembre declaran el estado de excepción y los civiles son juzgados por cortes marciales.
En Europa los partidos socialdemócratas tenían un ala revolucionaria y Lenin se la pasaba intentando unirlas para crear lo que años después sería la internacional comunista. Una de las divergencias que les impedía a los bolcheviques reclutar a líderes como Rosa Luxemburgo era la política de ataques guerrilleros que los bolcheviques llevaban en Rusia. En particular en el sur.
Porque en contra de lo que se dijo después en la URSS, y de lo que creen muchos zurditos a la bartola, los bolcheviques no le tenían asco a agarrar el fierro y hacer ataques guerrilleros. Más sobre eso en el próximo artículo.
Rosa Luxemburgo nació en la Polonia ocupada por el imperio ruso. Tuvo una enfermedad que la dejó renga de chica. Se unió al partido de izquierda polaco "Proletariat". Escapó a Suiza en 1889. Estudió ciencias sociales en Zurich. Rosa negaba la autodeterminación de las naciones. Se oponía a la independencia de Polonia porque daría más fuerza al capitalismo, Lenin le retrucaba que el nacionalismo imperialista de los rusos era mucho peor.
Creía, también, sinceramente en la "espontaneidad del proletariado" frente a la férrea organización de Lenin. La defensa de la espontaneidad tenía que ver con el enfrentamiento del ala izquierda con la socialdemocracia en Alemania.
El capitalismo, como lo veía Rosa, llevaba de la crisis, al estallido y a la huelga general de ahí a un "salto de conciencia" y eso traería las organizaciones para crear el socialismo democrático. Estuvo presa entre 1904-06. En 1910 rompió con la dirección de la socialdemocracia alemana. En 1912 Rosa junto con otros socialistas declararon que, en caso de guerra, los partidos socialistas iniciarían una huelga general. Al comienzo de la guerra (agosto de 1914) y sin huelga general Rosa organizó manifestaciones llamando a no incorporarse al ejército y a no obedecer órdenes. A esta mujer judía, chiquita y renga la consideraron un peligro para el imperio alemán y la llevaron en cana. A partir de 1916 formó parte con otro loco lindo, Karl Liebknecht, de un grupo que se llamó, cool!, "Liga Espartaquista". En 1919 una ola revolucionaria apareció en Alemania. El día 15 de enero de 1919 una multitud de soldados del gobierno Alemán, donde participaban los socialdemócratas, logró por fin acabar con la feroz agitadora que se defendía con un paraguas. La democracia siempre es el camino.
Ahora bien la política de Stolypin consistía en fortalecer a los campesinos que estuvieran "dispuestos" para consolidar una clase de propietarios pequeño burgueses. Se suponía que esta "clase propietaria" desempeñaría el mismo papel conservador que en Europa Occidental. Pero pasaron dos cosas, primero los campesinos rusos no estaban especialmente ilusionados con abandonar la comuna rural. Además, y esto es más serio, la creación de pequeños propietarios terminaba por dividir a los campesinos puesto que aparecía una clase de campesinos "fuerte" y otros campesinos sin tierra que tenían que trabajar para los fuertes. Los propios terratenientes no le veían la ventaja a tener que competir con pequeños campesinos con granjas modernizadas y abastecidos por créditos. Para 1910, con el zar, con Stolypin, con los partidos de izquierda hundidos y con la represión los campesinos vuelven a levantarse. Mantengan la fe.
continuara |