cris

cris
Con Cristina.

martes, 31 de diciembre de 2019

Destruyeron el país a propósito o "algo" les falló.

Es posible que ambas cosas sean ciertas, había voluntad de poner al país de rodillas y, al mismo tiempo, varias de las políticas económicas eran disparatadas.

Hay datos que sorprenden, por ejemplo, una administración obsesionada por las cuentas, recuerden cuando Aranguren decía que había un excel que cumplir, tenía un déficit enorme. Al menos eso es lo que ellos dicen.

Según parece, por loco que pueda sonar, algo que parece una broma, el chiste venenoso de un peronista del ala extrema, es verdad: que tomaban deuda para cubrir el déficit.

Tomaban deuda para no tener que emitir.

Me hace pensar en los griegos, cuando Siryssa, o como se llame el fallido partido progre griego, pensaba rebelarse, estaban en tratativas con los rusos para importar máquinas capaces de imprimir billetes. Según parece la Comunidad Europea les había exigido destruir las máquinas. Al final decidieron seguir el camino "razonable" de no emitir. Cagaron los griegos.

Según los medios el macrismo había llegado para poner orden, el déficit de menos del 2 % del kernerismo era inaceptable, y se lo suponía, al gobierno macrista, el más austero de todos los tiempos. Vamos, borró casi todos los ministerios, echaron arriba de 100 mil empleados públicos y redujeron los presupuestos de salud, educación, jubilaciones y todo lo que se les ocurra.

¿Por qué había/hay tanto déficit?

Es posible que sea la recesión galopante, eso fue desde un principio y se fue profundizando, ningún tipo serio, o jodon para el caso, me puede venir con que no sabían que, las restricciones monetarias, el tarifazo y todo el resto, no iban a resultar en una recesión machaza.

Es razonable que la recesión violenta haya dado como resultado una caída enorme de la recaudación. Sobre todo si dejaste de lado los impuestos directos, ustedes saben, a la riqueza, autos de lujo y afines, para recaudar por medio del iva y de los impuestos a la clase media, ganancias y etcétera.

En los primeros tiempos le devolvieron, la guita de los impuestos, a los ricachones.

Endeudarse, en si mismo, no tiene nada de malo, lo malo es cuando te endeudas con el propósito, perdón por repetirme tanto, de cubrir el déficit.

Yo me preguntó si habrá algún manual de, no se, Yale o de quien sabe dónde, en el que figure como una política recomendable esta estupidez.

Endeudarse en dólares para pagarles a los jubilados. Tienen el cerebro en el trasero.

También es cierto que era un gobierno “caro”, echaban a laburantes de a pie, la “grasa militante” y en su lugar ponían a decenas de gerentes con sueldos de fantasía, para no hacer nada. Recuerden que el mejor estado es el que no hace nada.

Como seguramente habrán observado, una tragedia tiene que durar solamente 5 actos, si un tipo además de negro, gay, pobre y judío es argentino, estamos en una comedia, desde ese punto de vista que todas esas políticas hayan sido instrumentadas para combatir la inflación es de una comicidad abrumadora.

También para combatir la inflación inventaron los lebacs/leliqs o lo que sea, para que los ganadores, poquísimos pero llenos de guita, se deshicieran se los pesos y pusieran a andar la bicicleta, versión para ricachones, no vaya a ser cosa que se les ocurra invertir.

Desde el punto de vista del sentido común, todo les salió mal. Bueno, entonces hay un sentido que no es común, porque está clarito que, los exportadores de materia prima a gran escala, ganaron. Por ejemplo estamos exportando gas, otra vez, es el gas que no podemos pagar. El gas se exporta a un precio menor al que pagamos los argentinos. Eso es más robo y corrupción que todo lo que se hizo desde Videla para acá.

Y ahí empieza vislumbrarse la raíz del problema: es la globalización, o como quieran llamarle. La harina, la carne, la luz, el colectivo dolarizados.

Es interesante, se le exige a la industria que compita con los alemanes, por decir algo, mi, casi, única ventaja es que estoy en un país con petróleo, ahora resulta que tengo que pagar la energía al mismo precio que los alemanes. Eso no es competencia, es una especie de cargada.

Esa gente sin rostro es el mundo de la globalización donde ellos ponen las industrias y nosotros los porotos, donde ganamos los sueldos de Perú y pagamos la leche como en Suiza. A eso le llaman "integrarse al mundo" ¿se acuerdan como repetían eso? Todavía lo dicen, los muy turros, ponen como gran mérito, de la dictadura desastrosa que dejó al país en la ruina, el haberse "abierto", el culo abierto, al mundo.


Feliz año nuevo para todos aunque todavía hay presos políticos y Bonadio está suelto, un papelón.

sábado, 14 de diciembre de 2019

10 de diciembre 2019, plaza de mayo.

Anduve por la plaza, hacía tiempo que no lo hacía. Estuve subido a una especie de balcón, tengo achaques pero a los 60 todavía puedo trepar estilo hombre-araña. Ya desde el principio el calor era más o menos insoportable, una familia, de esas que duerme en la calle, por lo que vi, le echaba agua a la gente con una manguera, todos agradecidos, los pibes del CTEP, creo que son esos de Grabois, se cansaron de vender cerveza y bebida fría. Pude ver a esa multitud, desde ya, les voy diciendo que nadie va a saber nunca, cuantos había el 10 de diciembre del 2019. La gente entraba y salía de la plaza continuamente, cuando yo llegué, eran las 6 de la tarde, mucha gente se estaba yendo y al mismo tiempo éramos cada vez más. Me tuve que quedar, como un náufrago, subido al balcón ese, porque no se podía bajar, la gente estaba apretada, feliz y desfalleciente, algunos cumpas se desmayaron y otros cumpas les echaban agua, los abanicaban o los llevaban a babucha.

Que mezcolanza que había, lo que es ser argentino. Teníamos pibes de los barrios, muchos, señores como uno, de clase media, no me extrañaría que algún corazón rebelde de la década del 70 haya bajado desde Belgrano, Palermo chico o lo que sea por el estilo, gente humilde, pero muy humilde, con sus nenes subidos a los hombros.

La música no se oía casi pero daba lo mismo porque la multitud se despertaba, de a ratos, y cantaba, me sorprendió que no era un canto de puteadas, "Alberto presidente" y cosas por el estilo, un coro casi tierno, casi afinado, más canción que grito.

Me sorprendió escuchar la canción de la gloriosa juventud peronista, los recuerdos se me mezclan pero creo haberla escuchado en los 70, sin ir más lejos, aquel 1ro de mayo del 74 cuando Perón los echó de la plaza y después durante el 75 y aquel día de junio del 75 cuando Lorenzo hizo rajar a López Rega.

Pero más que nada recuerdo haberlo escuchado en las marchas de los 80.

Los organizados eran una minoría, el grueso estábamos sueltos, los partiditos de izquierda siguen jugando su propio campeonato del ascenso en la 1era D, mientras todos están con Cristina y coinciden en la mayor parte de los planteos porque tampoco hay 10 mil posturas para elegir en nuestro país y, sin embargo, parece que no se pueden juntar. Bueno, tal vez no sean esos tiempos, tal vez, todo pase por la sociedad civil y la militancia social. Vi banderas de alguno de esos grupos que se hacen llamar PC, uno se pregunta qué gran diferencia habrá entre ellos.

Es una pena, se cantó la marcha pero menos de lo que uno pudiera pensar, al menos en capital y una parte de los alrededores, el perfil es más de una izquierda “clásica”, siempre al estilo criollo, claro.

Es fácil distinguir entre los que quedaron pauperizados y los laburantes que conservan, al menos en parte, su poder adquisitivo, los choris y las cervezas se vendían sin problemas, mientras, en los costados de la manifestación, familias con nenes pedían limosna. Es notable que todos estábamos felices y todos pesamos, más o menos, lo mismo.

Afortunadamente vamos a contramano del mundo, en Bolivia dieron el golpe, el viejo y querido golpe de toda la vida, matan a la gente y después van al velorio y matan a más gente, les van a dejar un país arrasado, proscripciones y un gobierno salido de elecciones amañadas. El golpe con milicos payasos pasó a la historia, la dictadura se vota democráticamente en elecciones libérrimas. En Chile el ejército de ocupación te mete balas en los ojos y se cogen a las pibitas. En Uruguay van a tener una dosis de Macri, Macri demoró un año y medio en fundir al país y quedar en default, les apuesto lo que quieran que, fundir al Uruguay, les va a llevar mucho menos tiempo.

Hubo música y baile pero con una onda, como decirlo, consciente, politizada, algo raro que no se veía, en esta magnitud, en décadas.

Somos, los argentinos, unos bichos raros.

Mientras en el resto del mundo las campañas de la derecha fachistona son un éxito y las dictaduras neoliberales siguen, una tras otra, por décadas, acá les hicimos pito catalán. Usaron el poder de la guita y el empresariado, de la embajada, del fondo monetario, del estado, de la policía facha, de la clase media resentida y de todo lo que se les ocurra y no resultó.

Ya sé que los problemas son graves, que el gobierno democrático tiene serias vacilaciones, que todavía falta mucho y que los responsables del desastre y la dictadura están sueltos y hasta sueñan con volver pero, no sé, me parece que las cosas están cambiando.

Es el final de los años oscuros.


En el momento en que escribo esto el cumpa De Vido quedó en arresto domiciliario, va a estar libre en unos días, seguramente, la causa de Río Turbio es un mamarracho peor que la del motorman del Once o la de los cuadernos quemados.

miércoles, 4 de diciembre de 2019

No me lo discutan más, la mejor gobernadora fue la Sra. Vidal.

Con los años uno comprueba que, en la vida, todo es ilusión. A la gente razonable no le importa tener un techo, comer o estar sana. Lo que importan son los sueños y los anhelos.

Si hay un protagonista de los últimos años, que resume las ilusiones de millones, esa es la Sra. Vidal.

Tomemos, por ejemplo, la obra pública ¿con que sueña la gente? con grandes puentes, con autopistas de 16 carriles, con rutas imponentes que no recorre nadie, con diques, con murallas y túneles gigantes, o con las pirámides de Egipto.

¿Saben? toda fe, toda esperanza, tiene sus detractores, aparecieron tipos, supuestos expertos, de vialidad a refutar la existencia de los puentes y caminos gigantescos, construidos por la Sra.Vidal. Son unos mediocres incurables, están aferrados a los estrechos límites de la experiencia cotidiana, es gente que cree en números ¡números! ¡A quien le importan los números! Lo importante es lo que la gente se imagina, la gente cree haber visto puentes, construcciones majestuosas, las grandes autopistas por donde pasara el hombre nuevo, como diría el Che Guevara.

¿Cómo puede haber personas que, en su cerrazón, no vean las rutas interminables? Que van y vienen incesantemente. Que importa lo que diga vialidad.

Se olvidan del testimonio del pueblo: "yo voy para Villa Tranquila", nos cuenta un paisano, "y veo obras por todos lados, el puente 'García Márquez', recién construido, la carretera de circunvalación 'Nicky Caputo', la ruta 138 que lleva desde 'las Polinas' hasta 'Ciudad Calavera' ¿Cómo es que no las ven?".

Los locos no son los que ven con los ojos del corazón, sino todo lo contrario. Por ejemplo ¿quien puede negar la felicidad en los rostros de los que se beneficiaron con las cloacas que no se hicieron pero que brillan en el espíritu?

Ya lo declaró, en su momento, la Sra. Vidal, la gente no quiere hospitales, era por las acusaciones de los fanáticos ultra K que pretendían que la gobernadora inaugurara 6 hospitales que estaban casi listos. Los hospitales recuerdan a la enfermedad, al sufrimiento y a la muerte ¿Quién quiere ir a un hospital? Nadie, entonces porque el gobierno despilfarraría millones en esos centros del dolor y la enfermedad, es mucho más lógico darle el dinero a las empresas eléctricas para impedir cortes que se producen igual. Es más, parece que cuando más guita ganan, más cortan, son unos vivos bárbaros, además de ser empresas europeas de incuestionable prestigio.

Todas esas obras que nunca se hicieron, van a resultar en un futuro mejor, tal vez no lo vean nuestros hijos o nuestros nietos, pero eso no importa, esas cosas toman tiempo. Me acuerdo de la campaña electoral del 2017, Macri prometía que para el, no se, 2030, íbamos a producir un millón de automóviles que era lo que producíamos en el 2013, del mismo modo, después de un proceso de cambio acelerado, en el año 2047 podríamos alcanzar el nivel de vida del 2015 e inaugurar al menos un par de los 6 hospitales, soñar no cuesta nada.

Otro aspecto que revela la genialidad de la ideología vidalista, es el endeudamiento en dólares. Primero que la deuda no es para cualquiera, solamente países con economía sólida se endeudan, le han prestado plata, con intereses leoninos, a la Sra. Vidal porque su visión esperanzada es una autentica fuente de inspiración. Los prestamos generosos son un premio a un mensaje claro, incluso brutal en su realismo: "Vamos a ir unidos, todos juntos", "a cruzar el río", "a subir al aconcagua" y "se me hunde la canoa".

¿A alguien se le ocurre algo más sensato que endeudarse en dólares para pagar sueldos? Eso es administrar y no andar con tonterías.

Otro mérito innegable de la gobernadora es el combate, abierto y denodado contra las mafias de todo tipo ¿Cuántos bunkers de la droga fueron debidamente arrasados por las fuerzas del orden? Es más, hasta me atrevo a sospechar que no quedó ningún bunker, en ninguna parte. Busquen algún bunker y a ver si encuentran.

La droga prácticamente desapareció, y si no me creen, salgan a la calle y van a ver que no encuentran a nadie drogándose.

Es un glorioso triunfo inexistente, contra un enemigo inexistente, para solucionar un problema inexistente. Pero es una ilusión que entibia nuestros corazoncitos ¿Qué importa que cueste fortunas y que muera un montón de gente sin ningún sentido?

A la mafia de la efedrina y a la Morsa no las vimos nunca más, sin ir más lejos.


Reconozco que es una expresión de deseo pero… ¿no sienten que algo le va a pasar al Payaso?