Dirán lo que quieran pero el gobierno macrista es marcha atrás en todas las líneas.

Cuando llegaron en diciembre del 2015, parecen siglos, dijimos, dijimos la casi totalidad de los blogs politizados y locos sueltos, que el principal obstáculo para la “consolidación nacional”, el triunfo del diálogo y la modernización, en la argentina era Cristina. Tal vez fue mala señal que el día 9 de diciembre del 2015 una multitud se reuniera para agradecerle. El nuevo gobierno de extrema derecha tenía que bajarles los impuestos a los ricos, armar una bicicleta financiera, entregar los recursos a sus “legítimos dueños” y desindustrializar, en los primeros meses esto se cumplió. Hay cosas que parecen difíciles de entender, que la administración, las administraciones para el caso, derechista este obligada a poner en marcha una gran bicicleta ¿Por qué? Porque lo exigen los bancos, el banco mundial, el banco europeo o como se llame, hay aspectos del poder de estos bancos que entran dentro de lo risible, por ejemplo, en los últimos días hemos asistido, atónitos, a la reaparición de Cavallo, en primer lugar, considero que es posible que el nuevo, y creciente, protagonismo de Cavallo sea un modo de decirnos que controlan la “opinión pública” y que no les importa nada, pero no es improbable que sea una demanda de los bancos. También se armó una “nueva policía” apuntada a la represión, por ejemplo el otro día leía que la “guerra contra las drogas” era todo un éxito, están metiendo presos a pibitos que fuman porro a razón de 10 por día. En esos días la cana le dio palo a todo el mundo, los polleros de Cresta Roja, los de Pépsico, cualquiera. El secuestro de Santiago Maldonado, probablemente, no forma parte de un plan sistemático pero es coherente con la oleada represiva. Y, sobre todo, es coherente con entregarle la patagonia a Benetton. Además se asentó una censura en los medios cada vez más rigurosa, los tibios fueron reemplazados por derechosos, los derechosos por radicales y los radicales por apologistas de la dictadura. En los primeros meses pareció que, el nuevo gobierno, gobernaría, como corresponde a un gobierno de extrema derecha, por decreto. Los elementos fundamentales para gobernar por decreto son tener un parlamento con una oposición complaciente y una corte suprema de amigos. Pero algo no resultó como se esperaba. Hace unos días, recordaba que a fines de abril se cumplió el primer aniversario de un acontecimiento fundamental para la argentina moderna, la excavación de la bóbeda (sic) de los Kirchner en Santa Cruz. En aquel entonces estaba de moda el fiscal, mejor nombre que este no van a encontrar, Marijuan. Marijuan estaba excitado y subido a una caterpillar buscando el tesoro secreto, huesos de dinosaurio o lo que sea. Uno se pregunta si era de verdad, si de veras esperaban encontrar, no se, la cueva de Ali Babá en Santa Cruz. Por esas fechas se produjo la citación en Comodoro Py para Cristina. La citación ni siquiera guardaba visos de legalidad, era pura persecución. Era ahí, mediados del 2016, que Cristina tenía que ir presa. Yo supongo que se comieron el amague, por aquel entonces todo hacía pensar que Cristina no iba a presentarse a elecciones, no tenía fuerza política propia, y el bloque del peronismo se estaba achicando, además la campaña mediática había reducido a los partidarios del gobierno anterior a la defensiva, piensen en la campaña descomunal de los bolsos de José López, las monjitas y lo que sea por el estilo, había gente, no especialmente estúpida o desinformada, que decía que la detención de la ex presidenta era cuestión de horas. Otros, más cínicos, afirmaban que no era necesario “torcer” las leyes para lograr algo así puesto que “no volvían más”. Para fines del 2016 empezó a hacerse claro que no alcanza con bajarle o, hacer desaparecer del todo, los impuestos a los ricos, es necesario hacer el ajuste. La brecha entre los ingresos caídos del estado y los gastos, generados en parte por una política clientelista, se volvió abismal. Las cifras del déficit argentino son similares a la de países en guerra como Ucrania, Libia e Irak. Se comieron también el amague de Randazzo, la idea era que Cristina renunciara para que ascendiera un Randazzo, o algún otro figurón, son políticos similares a los que pululan en la cámara de senadores y que son “peronistas” en su provincia y de extrema derecha a nivel nacional, más o menos como los sindicatos de los gordos, que reparten, no siempre pero maomeno, entre sus afiliados y quieren joder a los pobres, que, en muchos casos, fueron sus afiliados. Todo parecía indicar que iba a tener una interna feroz que, aprovechando el tema de las PASO, iba a terminar por llevar a una debacle a lo que queda del peronismo. Repentinamente en un gobierno que parecía sólido y confortable en la extrema derecha le aparecieron dudas, ya no era tan razonable meter presa a Cristina, de hecho el momento para hacerlo ya había pasado, los parlamentarios, aun los “dialoguistas” tenían reparos, tal vez era bueno que Cristina estuviera en la calle para tener algo que negociar, algo con lo cual amenazar a un gobierno que, oh! sorpresa, venía para ajustarlos. La corte suprema resultó una suprema de pollo, en primer lugar se demostró que el poder judicial tiene serias disputas internas, que muchos se resisten a jugar el papel de peones, incluso que, la opinión de instancias internacionales, cuenta. La corte, podemos decir, que acompaña pero que no es vanguardia. La extrema derecha tiene problemas con eso, hay tribunales que le frenan las “iniciativas” a Trump, hay una opinión internacional que lo tiene mal. Por ahora los medios están totalmente a favor del gobierno macrista, pero uno sospecha que las contradicciones no van a tardar en surgir. Me llama la atención que no se hable de eso pero, la verdad, es que todavía no sabemos el resultado de la elección del 13 de agosto, que hayan contratado una empresa de unos socios y hayan puesto a sus propias agrupaciones a controlar no es algo que nos llene de tranquilidad, precisamente. Es más ¿Qué pasó con los votos de esas famosas mesas de “0 votos para Cristina”? En la Internet dicen que el juez Culotta o como se llame, un culotta puesto a dedo por el macrismo no hizo contar las mesas sospechosas. Esa demora en contar las mesas es, de por si un fraude, nos hicieron creer primero que habían ganado ellos, después que la diferencia era de pocos votos y ahora resulta que eso también es mentira ¿Se sabrá alguna vez el resultado de verdad de las PASO del 2017? No veo porque tipos que dicen que, el voto, debería ser calificado y movidas así, no van a hacer fraude. El fondo de las contradicciones es el ajuste. Una vez que redujiste los impuestos a los ricos ya no tenes plata para boludeces. El ajuste debe llevar a los jubilados a los 150-200 dólares como en el 2001, eso nos da una mínima un 50 % menos que ahora, hacen falta 2 años con inflación arriba del 20 % y jubilaciones congeladas, no solo eso, el ajuste nos lleva a despedir ¿Cuántos dijo López Murphy? 2,3 o 4 millones de empleados públicos, con eso los salarios reales también van a caer en un 50% en promedio, es lo que gana la gente en países como Perú o Colombia. Caída del consumo y del PBI de proporciones épicas. Algunos dirán que es imposible, pero no lo van a hacer de un saque, lo quieren hacer durante los próximos 2 años. Como de costumbre el problema no son los enemigos, la enemiga para el caso. El problema son los aliados, puede ser que me equivoque y, como no les tengo simpatía, vea cosas que no están ahí pero me parece que, en los últimos meses, la actitud de los “peronistas moderados” en las provincias pasó, de aprobar todo lo que venía, a una oposición que es blandengue pero que les vota en contra. Donde leen “provincias” pueden, con algunas salvedades, leer “sindicatos”. En las últimas semanas, sobre todo cuando se vio que Cristina tiene 3 o 4 millones de votos en la provincia, los “peronistas de antes”, de antes de no sabemos bien que, se vienen acercando. Por algún motivo los “peronistas de antes” no pudieron crear otras figuras que no fueran tipos como Massita y Urtubey, no se si, el viejo Marx, era el que decía que cada fase de la historia encuentra los dirigentes que le corresponden. Por ahora parece que tenemos “ajuste gradual”, lo que va a hacer que el esquema estalle, al menos desde un análisis lógico, es que el ajuste no va a disminuir el déficit, para empezar nunca lo hace, pero además si casi toda la recaudación esta basada en impuestos indirectos, esos impuestos son sensibles al consumo. No lo estamos diciendo solamente los zurditos de siempre, lo están diciendo los economistas de derecha que, ocasionalmente, no están en el gobierno. La derecha “concentrada”, sea lo que sea que eso quiera decir, esta pidiendo el ajuste “de verdad” y no el deterioro más o menos gradual que estamos viviendo. El ajuste gradual genera anticuerpos, da tiempos para armar estrategias defensivas, permite que se lo eluda, incluso que se lo revierta, además, a estos genios de la propaganda, que tienen adormilada a la gente simple con la esperanza de un futuro promisorio, les importa un carajo el futuro. Quieren la guita ahora, que después se pudre todo. Y otra cosa más, así como la fecha para detener a Cristina, ya se les pasó, con la fecha para el “ajuste de shock”, onda Naomi Klein, les está pasando lo mismo.

No conseguí imágenes de Naomi Klein desnuda ¿Qué pasa con la izquierda? ¿Eh?