Temas que apasionan a la humanidad ¿Quién ganará? ¿El Guasón o la muchacha del sillón de ruedas?

Lo primero que usted ve es que el partido genérico de la derecha, bastante más radicalizado de lo que muchos creen, se ha divido, momentáneamente en sus dos compontes originales. El voto de derecha puro y duro, ustedes saben, tengo un amigo que dice que: “son todos iguales” y, como son todos iguales, el vota lo más a la derecha posible. Piensen que el PRO ocupa el mismo lugar que los extremistas de derecha racista de Europa, el liberalismo es solamente un juguete para los empresarios del “círculo rojo”. El otro componente del voto derechista son los votantes pajaritos, el pichón votante es un ser tierno, le gustan los colores, consignas como: “¡Te queremos mucho!” y un pelotero gigante. Si el votante pajarin pensara un poquito, si levantara la vista, si se informara, no mucho, no hay nada de sofisticado ni estrambótico en esto, notaría que la ciudad está toda más o menos hecha mierda. Pero eso no va a ocurrir, a lo sumo, la próxima vez el votante “despolitizado” va a ser hipnotizado por otros colores, por otros carteles, por otras caritas sonrientes, por otras musiquitas. La boludez es la verdad esencial de la vida humana, mis queridos. En principio uno pensaría que hay que ser un derechista de una convicción envidiable, si hubiera gente de izquierda con la voluntad y el fanatismo que tiene la derecha la revolución y el socialismo serían cosa de meses, para votar a un candidato como Larreta. Los antecedentes del tipo son horribles, habla peor que Macri, lo que ya es un decir, y carece de cualquier atributo físico, oratorio o lo que venga. En mi vida, larguísima, he visto de todo pero nunca un político tan pobre, tan poca cosa como Larreta. A lo mejor la campaña es una genialidad y está basada en la lástima. Aunque incluso ahí gana Michetti. Es una muchacha bonita que se sobrepone a la adversidad y que parlotea incesantemente con la mejor onda. Si esto fuera una cuestión puramente lógica debería, en una elección, pasarle el sillón de ruedas varias veces, por encima a Larreta. Sin embargo parece que no. Han aparecido encuestas que le dan una ventaja considerable, de hecho indescontable a Larreta. Ya sé que ahora me van mentar el caso de Salta donde pasamos de “empate” a paliza en media hora, el pobre Massita se quedó con el avión esperando, ¿Dónde me lo meto? Habrá pensado el Renovador. Esto no parece igual que lo de Salta, en Salta están los votos de baja calidad que atormentan a Pino, Salta es un territorio salvaje donde cualquier wachiturro te inventa una encuesta en un bar, tomando grapa. La ventaja de Larreta parece más creíble. ¿Qué quiere decir eso? Que, esta vez, la derecha tal vez haya hecho una de más. Tal vez, es posible, habría que ver, etcétera, a Larreta le va a costar más que a Michetti conservar el voto “despolitizado”. Lo que “la gente” quiere, desde hace tiempo, es votar a “progresistas” anti kerneristas, en el 2013 la coalición Pino-Lilita-Radicales-Etc. ganó la elección, no el PRO. El problema es que ese misterioso eje progre-antiK nunca termina de conformarse, debe haber algún tipo de lógica social que hace imposible que se dé. Los candidatos del UNEN o como carajo se llamen vienen flojitos, los lectores saben más que yo sobre el tendal que está dejando la coalición PRO-radicales, además de la deserción de los radichas algo les falla, incluso me llama la atención que marche primero Lusteau o como carajo se llame, él también, y que es un tipo que está quemado sin haber llegado a ser nadie. Si Michetti gana desde ya que les voy anticipando que la paralítica, bella metáfora de lo que es la pequeño burguesía criolla, les pasa por arriba a todos. Pero si gana Larreta muchos de los que hayan votado a Michetti van a darle la espalda al PRO porque, despojado de las pelotitas y la “buena onda”, es muy derechista. El problema es que, por como es este distrito, los votos van a emigrar al UNEN o como sea que se llame lo que quedó del UNEN-queseyoque del año 2013. Puede haber una segunda vuelta entre Larreta y Lusteau, lo que tiene algo de grotesco, es como una proyección de la decadencia de la pequeño burguesía criolla, y que gane el mejor. En cuanto a las chances del kernerismo, es muy simple, para el kernerismo, como para cualquiera, Larreta es un rival interesante, antipático, tontuelo, derechista y ex funcionario de Delarua, ya lo dijimos un regalo de dios. Pero eso implicaría que los votos, algunos, unos cuantos, para Michetti se han pasado al kernerismo, o, al menos, no al UNEN. Para que eso ocurra el FPV debería tener un candidato que este con la Shegua pero que aparezca como independiente, el electorado, exigente, de la ciudad exige que lo engañen. El único que da el perfil es, acá se mueren todos, Ibarra pero Ibarra quedó aplastado por la explosión de Cromagnon y de esa no vuelve más. Por otra parte reconozcamos que hay cosas difíciles de entender, que Heller y Cerruti, o como se llame, hayan ido separados, sin ir más lejos. No se puede negar que Recalde es un buen candidato, más joven y más enérgico que Filmus y con una gestión interesante en Aerolíneas pero, para ser competitivo, tendría que tener distancia con el gobierno, digamos que al revés del resto del país donde, aparecer en una foto con la Shegua, suma. Igual esto no terminó, y ni siquiera cuando se termine se puede decir que terminó, uno tiene la sensación de que algo se puede llegar a romper en el PRO, que eso aparezca a la hora de votar sin que se haya visto antes.