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Con Cristina.

viernes, 14 de noviembre de 2014

Llega el terror de los kerneristas: La CONADEP de la corrupción.

Tiemblan los paniaguados del régimen, los genuflexos del poder. La justicia, severa e implacable, muestra toda su majestad. Los corrutos no saben donde escuenderse, es tremendo.

Pero lo que no se acuerdan los fanáticos de honestidad y la decencia es que ya hubo una CONADEP contra la corrusión. Nos parece que hay mucho pendex, mucho imberbe, como dijo el General, o mucho cabeza hueca que habla porque el aire es gratis o, mejor dicho porque le pagan, y mucho viejo choto que debería saber perfectamente que la dictadura, por cierto que una dictadura genocida del orto, de Aramburu y Rojas, entre otras bellezas, como prohibir decir “Perón” o “Evita”, inició unos muy publicitados, en aquellos años, juicios contra los populistas corrutos.

Porque es así, mire, vea, los populistas son corrutos porque los corrutos son populistas, y eso es todo ¿Cuál es la parte de esta lógica trascendente que no captaron?

Porque no se si saben que, antes de la llegada del Tirano Prófugo, uno caminaba por el banco central, o por la concha de tu hermana ¿Por qué no? Y pateaba portentosos lingotes de oro. La leche costaba 5 centavos y nadie la podía comprar pero el banco central estaba hasta el culo de oro. Es probable que esa boludez no sea cierta, pero antes del Tirano Prófugo los criollitos de a pie se cagaban de hambre en medio de la abundancia, hasta ahí si es cierto.

Un buen día, un mal día dirán los adocenados de la tiranía, el régimen populista fue derrocado por un golpe de estado, es historia conocida. De lo que no se habla tanto es de que Leonardi firmó el decreto de la CONADEP de la corrusión el 7 de octubre de 1955, Aramburu y Rojas se inventaron una comisión para investigar los crímenes, tremendos todos ellos, de la dictadura populista y sus aberrantes actos de corrusión. Además imagínense que los generales patriotas de la renacida democracia no tenían parlamento, ni justicia independiente, ni medios opositores, ni una mierda. Podían poner a los más connotados demócratas, imaginate los demócratas de Aramburu lo que eran, de jueces y de fiscales. Imaginate las garantías constitucionales que debían tener los partidarios del Tirano Depuesto.

Las acusaciones contra el Tirano no podían ser más claras, haber impedido “toda la influencia extranjera” en definitiva de aislarnos del mundo. Del “monopolio estatal” de las fuentes de riqueza. De haber estatizado el sistema bancario. De haber estatizado los ferrocarriles, las empresas de gas y los teléfonos. Y de haber creado un aerolínea del estado. Corrusión pura, como se ve. ¿Quién puede negar la veracidad de estas acusaciones?

Eso sin olvidar lo más importante y es que el Tirano era un viejo medio puto que se cogía a las pendejas. Lo que es una cosa gravísima que ningún argentino de bien debiera olvidar.

La comisión actuó con gran eficacia, los jerarcas del régimen fueron capturados y sus domicilios allanados en busca de más pruebas de la infamia. A lo mejor buscaban a las pendex que el viejo se fumaba, no sabemos. Ex funcionarios, ex parlamentarios, sindicalistas o simples simpatizantes del Tirano fueron puestos a disposición de la justicia. Algunos corrutos que hacían películas en los tiempos del Tirano Depuesto también fueron debidamente detenidos por sus relaciones inconfesables con el régimen. El presidente de la Comisión era un marino, verdadera avanzada moral de la patria, llamado McLean, me hace acordar un tema de Les Luthiers donde el ministro de cultura es el cabo Anastasio López.

El Tirano fue acusado por “sembrar el odio” aparte de por cogerse a la pendejitas. Cámpora y John William Cooke fueron detenidos por su modo de vida fastuoso y por portación de ideología. Al Tirano lo acusaron de poseer la friolera de más de 200 motonetas. ¿Y qué pasó con estos juicios “sensacionales”? Eso ¿Qué pasó? Lo mismo que con las motonetas.

Pero como la historia se repite, la primera vez como pura imbecilidad y la segunda como una verdadera mierda. Los milicos de la dictadura decidieron crear en diciembre de 1977 la CONAREPA. ¡Epa! A esa no la tenían.

La Pantera Rosa, el almirante de agua dulce y los otros héroes que le ganaron la guerra a un montón de niños, ancianos y pibas embarazadas, usaron la corrusión del gobierno de la Chabela como uno de los motivos del golpe.

La comisión CONAREPA, la arepa es una especie de torta frita venezolana, “investigó” las propiedades de la Chabela y de alrededor de 80 funcionarios del peronismo de la decadencia, le cagaron la casa del Tirano Profugo en Madrid y un par de boludeces más. La comisión tenía conchabados a casi 100 abogados y contadores, terribles ñoquis los pibes.

Y al final: chorizo, las “expropiaciones” y demás garchas carecían del más mínimo sustento legal, cuando terminó la dictadura el estado se comió cientos de juicios y los perdió. Adivinen que, la gran joda de los milicos justicieros, la tuvimos que pagar todos, todos los boludos que pagamos los impuestos. Hubo que devolverles más 200 millones de dólares a los funcionarios o a los hijos de los funcionarios de la Chabela, López Rega, Lorenzo Miguel, Menem y algún otro turrito que se me olvida.

Pero esta vez si. Esta vez la tercera CONADEP de la corrusión nos va a llevar al éxtasis, esta vez la lucha contra la corrusión nos va a llevar al éxito donde cualquier pelotudito, más bien chorro, que no puede administrar un kiosco, se va a convertir en un gran gobernante.

2 comentarios:

  1. De lo mejor que lei en mucho tiempo.

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  2. El tema es que la Gordis Lilita veranea en punta del Este y la Yegua en el desierto patagónico. Mauricio se pasea más de una vez al año por las Europas y De Vido no va más allá del kiosko de la esquina. Cuál es la joda de ser taaan corrupto? Eh?

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