¿No se le está yendo la mano, a la dictadura?

Vivimos bajo no-se-que plan de derechos humanos, aparece gente tuerta por las balas de goma, hay muertos y parece que no fue nadie, en medio de la pantomima de una supuesta investigación. En medio de los derechos humanos, en “plena vigencia”, hay, al menos, dos patrullas pérdidas que mataron gente, asesinos de uniforme, debidamente protegidos por la “piba maravilla” y los jueces. Los famosos jueces de la democracia, que aparentemente funcionan en automático, se ascienden solos, se ponen la corte suprema solos, se juzgan entre ellos, condenan a los sospechosos de un mínimo de imparcialidad y siguen adelante, millonarios y rozagantes. Los príncipes virreinales. Tenemos a dos, a falta de una, patotas asesinas, están sueltos, si tenes mala suerte, te los cruzas por la calle, asesinos sicópatas, impunes, de uniforme, les van a dar un premio. A los sacaojos les van a dar un premio, un premio por cada ojo volado por la bala de goma. Nos tuvieron años reclamando la ley y las instituciones y resulta que hay policías de civil, por orden de nadie o de jueces que, al parecer, legislan de incógnito y se cagan bien cagados en las leyes. Y salen a la calle a reprimir ilegalmente, patotas de tipos sin identificación, con los números de las motos cubiertos por un trapo. En medio de la ley y la plena vigencia de las instituciones te bajan la jubilación, primero te la bajaban con disimulo, con la inflación o quitándote los remedios, hasta la tele de cable te quitaron. ¿Cómo es que hay una policía que actúa en secreto? ¿Nadie se va a hacer cargo? Toda esa pérdida de derechos mientras te daban la célebre, la colosal, la maravillosa “reparación histórica”. A un millón de jubilados les dieron, no sé, 80, 100 pesos. Y, tendría que ponerme a averiguar, a los 4 de siempre, les dieron una fortuna, a la gente linda no se le puede negar nada. Si una ley no establece algún tipo de justicia, en la práctica, no existe, es la ley de la selva, como tengo poder apoyo a mis parientes, a mis cómplices, a mis secuaces a costa de un millón, 2, 3, 20 de infelices. Pero después no fue suficiente, en plena vigencia de las instituciones, con la ley en la mano, con el parlamento libremente electo, se saltearon un aumento y para marzo te van a dar un aumento que compensa la inflación de noviembre y diciembre, que ni siquiera llega a eso. Y cuando hubo protestas, mandaron gases y balas a los ojos, en medio de la legalidad y los pactos de la ONU y lo que ustedes quieran, volvimos a vivir bajo un ejército de ocupación, con sicópatas de uniforme echándote gas pimienta, siempre según la ley, y un protocolo que no existe, que nunca se firmó. Y a tipos, supuestamente argentinos con derechos, en la práctica, infelices parias cagados de hambre que los dejaron sin laburo, un tipo que fue electo senador les aconsejaba dedicarse a la cerveza artesanal, si se atreven a quejarse vienen con palos, tipos que reciben un sueldo y un arma para protegerlos, y los hacen mierda. Y si queres hablar podes pararte en una esquina, o podes mandar un mensajito en un teléfono, o podes sentarte como yo y escribir un blog, cualquier tentativa de ser escuchado te va a llevar a la cárcel. Y tipos electos como opositores, con promesas y campaña, mintieron alevosamente y votan cualquier cosa, sin ir más lejos los, supuestos, jueces que pervierten las leyes y dejan sin derechos a aquellos que deberían beneficiar. Pero parece que hay que ir en “unidad” con ellos. Que mejor manera de sacarles votos a los macristas que aliarse con otros macristas. Que dosis triunfal de realismo político. Y en una democracia, con todas las leyes habidas o por haber vigente, no te pueden meter en cana por ser de una tendencia política incorrecta pero tenemos cada vez más presos políticos y está prohibido hablar de eso, y van a la cárcel con leyes de excepción y no hay juicios y nunca hay pruebas de nada. Y hay una deuda creciente, el gobierno tomó préstamos por sumas inmensas con intereses leoninos y la guita se fue y no se sabe dónde está. Son 100 mil millones de dólares, doy el changüi de la guita de los buitres que son 20 mil millones más, 85 mil, o más, fugaron del país, nadie sabe bien como ni porque. Nadie sabe bien porque se pidió esa cantidad casi inconmensurable de guita y porque se fue casi toda, y con lo que quedó, si es que quedó algo, tampoco se hizo nada. Esa deuda no es legal, la Argentina no debería pagarla.

Se cumplieron 3 años del atentado contra “Charlie Hebdo”, o como se llame, Charlie funciona desde una sede en la clandestinidad y sigue tan islamófobo como siempre.

Leuco es el Goebbels judío.

¿Dónde queda el “Spa” de Lilita?