Nueva derecha, viejos derechosos, líderes de la oscuridad.

El otro día leí uno de esos, estos, blogs de lucha contra el gorilismo y afines, decían que se habían entrevistado con un muchacho que era cacerolero, que despotricaba contra el PRO y que parecía la punta de lanza de una nueva generación de la derecha. Desde que Alsogaray fracasó con la Nueva Fuerza en marzo de 1973 que vengo escuchando cosas parecidas. Los políticos de derecha, en este país son siempre un rejunte y una rascada. Sin embargo al único derechista serio de estas pampas, el Dr. López Murphy, le ha ido como el reverendo culo. El querido Bulldog fue primero manoseado y debidamente jarquereado en una interna con los chicos del PRO pero era un perrito callejero desde antes. Tal vez desde el día nefasto en que empezó a deslizar algunas ideas para un programa de gobierno. López Murphy se la creyó, creyó, cachorro inocente, que la derecha necesita explicitar alguna clase de programa para ganar elecciones y gobernar. Para empezar el programa de la derecha consiste de un diagnóstico: Hay inflación galopante o va a venir o el estado precisa ahorrar para combatir a la Unión Soviética o a los chinos o a los cartagineses. Y una solución es frenar la emisión de moneda y para eso hay que bajar los gastos del estado, bajar los sueldos, echar personal innecesario y reducir prestaciones y planes sociales. Cuando los sueldos estén al nivel de Nigeria y las ganancias de los patrones estén al nivel del Dubai va a ocurrir algo maravilloso, vendrán las inversiones. Las inversiones van a traer trabajo y no se que otra fruta y los ricos van a gastar tanta guita que, al final, les va a caer algo a los pobres, cuando llegue ese momento, que nosotros y nuestros hijos no vamos a ver, bueno, unos días después de eso vuelve Jesucristo y no va a haber de que preocuparse. Ahora ir a una campaña electoral diciéndole a la gente que tiene que bajarse el sueldo o quedarse sin laburo para ver si así a unos gringos, que más bien nos odian, se les va a cantar el culo venir a poner alguna fábrica de mierda, es un suicidio. La derecha ideológica hace esos discursos pero no funciona de esa forma. Carlitos, el fachero, ganó la interna del PJ disfrazado con un poncho. Los discursos de Carlitos se van a convertir en objeto de estudio en tiempos futuros. Charles I decía: "...dios los bendiga... ¡Hermanitos queridos!" con lo que quería decir: que dios los ayude porque lo que es desde el estado, los vamos a mandar a cagar. Me acuerdo el famoso discurso de la estratósfera y del cuete que nos iba a llevar...al Japón en un par de horas. No decir nada y desviar con cualquier insensatez es deliberado. Chupete, el majestuoso, ganó una elección, al peronismo y por aplastamiento, con la consigna inolvidable: "Dicen que soy aburrido!". Se pueden revisar los discursos del Chupete y todo es un gran rodeo, una gran desviación. Y está hecho a propósito, si ustedes se fijan los mejores publicistas y comunicadores de este país laburaban para el gobierno chupetista. Yo les digo, a riesgo de que resulte cierto, quien es el gran futuro político de la derecha en este país, es Del Sel. El tierno humorista introdujo frases que son un hallazgo, la primera la denominación "vago", la gente común, del pueblo, los pibes, son los "vagos", es decir no quieren trabajar, ya se van a ocupar ellos de ponerlos en vereda. Los "negritos" que no tienen para bañarse, espero que los Del Sel no los bañe como el führer nos bañó a los judíos pero no hay ninguna garantía. Igual ningún país del tercer mundo dá para un auténtico partido nazi, el nacionalismo, aun el nazi-onanismo, choca con los intereses imperiales. El "negrito" que... ¡No quiere ni bañarse! necesita que le den por el orto. Ese es el mensaje. Los buenos políticos de la derecha son material descartable la idea es que nadie se acuerde de quienes eran y de lo que hicieron. Hagamos una lista: Uribe, socio de los narcos y de los paramilitares, el de Ecuador que cantaba y lo retiraron aduciendo ¡insania!, Fujimori, leía de un papelito, el de Bolivia que agastraba las egues como un putito gringou, Collor de Melo, que introdujo, si, introdujo, los supositorios de cocaína. ¿Cómo ganaron? ¿Cómo pudieron juntar tantos votos? No creo que el voto derechista se deba a una sola causa y que, para colmo, esa misma causa esté actuando en todas partes, recuerden que en la dimensión desconocida no hay grandes respuestas, con un poco de suerte, hay buenas preguntas.