Entiendo que funcionarios políticos o políticos a secas tengan que “moderar” sus opiniones, llamar a otros fascistas es chocante y está bastante gastado. Además un político serio tiene que tratar de hacerse votar incluso por los de extrema derecha. Pero, cuando uno está solito con su alma y no tiene votos para perder, es bueno sincerarse. No hay una gran diferencia entre el “movimiento” de las cacerolas y los partidos neofascistas que pululan en Europa. No son abiertamente racistas porque ya vivimos en una sociedad segregada, los que viven en la burbuja, ustedes saben, nunca una escuela pública, nunca un colectivo, nunca caminar por “sectores peligrosos”, nunca juntarse con los negros, cuando uno es de esos tipos que solamente conocen a los pobres a través del programa racista que muestra a los morochitos en pedo que salen de las disco de Laferrere, cuando uno es uno de esos está a centímetros de volverse facho. En estos tiempos felices ya no necesitan un gobierno que proclame el apartheid, entre otras cosas eso haría enojar al primer mundo, solamente necesitan conservar la segregación que ya hay. Pero son fascistas, no quieren que nadie cruce la barrera, quieren que los pobres se jodan, que los bolivianos les construyan la casa y después rajarlos. Son fascistas desde el punto de vista de que el fascismo es un método y no un fin en si mismo. Y si no me creen fíjense como atacan a los movileros, la vez pasada se les pasó y una periodista de 678 pudo entrevistar a un montón de tipos de la marcha pero esta vez ya estaban prevenidos, esos ataques son deliberados, no quieren que periodistas que no son de la ideología de ellos los entrevisten, es sistemático. Una patota de cientos de tipos enloquecidos intentaron linchar a otro manifestante, este pibe era del PRO y había intentado impedir que un grupito entrara al congreso. Meterse de prepo en el edificio del parlamento y romper todo es la versión moderna y chanta del incendio del Reichstag ¿Qué querían ganar con eso? Nada, porque no necesitan de una acción coherente, le hubieran echado la culpa a la Campora y con eso tienen carta blanca para cualquier barbaridad. Cosas así ya pasaron acá, lo veía al Momo Venegas rodeado de guardaespaldas ¿Solamente a mi me llaman la atención todos esos matones? Lorenzo Miguel tenía no menos de 200 matones, armados, tipos expulsados de la cana por ser demasiado reventados, lumpenes que te torturan y te matan por un par de zapatillas. En los 70 nosotros estábamos convencidos de que las bandas de Lorenzo eran parte de la triple A. Mucha gente de buen corazón ve a los fascistas como pacientes de siquiátrico. No se equivocan pero… ¿Quien dijo que a los chiflados violentos no se los pueda utilizar para crear un clima de caos? Los que usan a los locos no son ningunos locos. El fascismo aparece cuando se arman mentiras a conciencia, cuando se pide una cosa y la contraria al mismo tiempo. Cuando se pide más asignación universal y vas a una marcha donde se exige que desaparezca. Cuando se pide seguridad y vas a una marcha donde alrededor tuyo están echándoles gas pimienta a periodistas. Lo que se busca no es convencer a la gente para que vote lo que ellos les gusta, se busca amedrentar, llenar de miedo y confundir. Los medios corporativos tienen un mensaje más y más violento. El partido socialista festejó el bombardeo a civiles desarmados en plaza de mayo, Musolini también decía que era socialista, y ahora van a rodearse de energúmenos que van en patota para linchar a su propia gente. El otro día, cuando conmemoramos el golpe del 24 de marzo, apareció un grupito a provocar con palos, yo me acordaba de lo que decían los militantes que se abrieron, hace unos meses del PCR, decían que al PCR le pagaba el banco Santander. No veo ningún motivo para no creerles. Pero lo peor no son los matones pagos, ni los sicóticos fascistas. Lo peor son los argentinos blancos, decentes, buenísimos y educados que mientras los matones y los sicópatas cagan a palos a los periodistas o a algún supuesto camporista, se hacen los boludos como perro que se lo están cogiendo. |
cris
sábado, 20 de abril de 2013
Alguien lo tiene que decir, estos boludos que salen a cacerolear son fascistas. Basta de hacer como que no pasa nada.
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Compañero,es verdad,a esos que intentan derribar la puerta del congreso ,una bala entre las cejas,aunque sea de goma ,no le parece?
ResponderEliminarEs que luce mal decir lo que son realmente. Suena poco dialoguista y los parientes se enojan, y uno se convierte en el fascista para todos ellos. Lo he dicho antes y lo repito: está muy mal visto oponerse al sentido común. Y para el sentido común esos enérgumenos son ciudadanos indignados que deben ser escuchados y obedecidos.Aunque eso vaya en contra de las mayorías que votaron al gobierno actual.
ResponderEliminarEn la práctica eso sería un suicidio del gobierno y el kirchnerismo no se suicida.
Creo que hay filmaciones harto suficientes como para que actúe la justicia... El problema son los jueces encargados de impartirla... ¿Será que la casta judicial se está poniendo nerviosa y no guarda las formas? ¿será el berrinche llevado a la marcha?
ResponderEliminarCapital nunca fue progresista. En un momento votó algo parecido y asumió Ibarra (que no se desempeñó tan mal) pero no embromemos, el porteño es facho. Estamos rodeados...