¿Puede ser democrático un gobierno que hambrea a la mayoría?

Uno no ve mucha diferencia entre este gobierno y el de Macri por ejemplo, o el de Delarua o el del Turco Putazo. Hay diferencias de época, de estilo y detalles así. A Macri no se le hubiese ocurrido ajustar en la universidad, los aliados radicales no se lo hubieran permitido. Pero... los políticos de corbatita no han cambiado nunca. Por ejemplo estos políticos radicales con discurso democrático y casi, casi, reformista son descendientes de los que pusieron bombas en plaza de mayo, de los que se presentaron a elecciones y gobernaron con el peronismo proscripto, los que le dieron intendentes a Videla y un largo etcétera. Son señores de traje en apariencia burgueses normales, imbuidos de buenas intenciones, esos señores elegantes, correctísimos, quieren lo mejor para el pueblo pero… pero, lamentablemente... tienen que ajustar. No es porque quieran, ojo, es por el bien de todos. Los políticos de corbatita todo lo hacen por el bien de todos, es más hambrear a la mayoría destruir al estado que educa y cura a la mayoría es por el “bien de todos”. La deuda, esa terrible como la que tomó Macri y que nadie sabe adonde fue también fue por el “bien de todos”. El “bien de todos” resulta ser lo que es bueno para ellos, una ínfima minoría, y, muchas veces, ni siquiera eso. Puede parecer una exageración, pura propaganda pero hay casos, estamos por llegar, en que el político de traje perjudica a su propia clase. Por ejemplo el corralito que les fumó las cuentas de banco a tipos de clase media alta maomeno que se pasaron años juntando dólares. Les tengo una noticia: no van a cambiar, no es posible que acepten que el beneficio de una minoría, aún una minoría relativamente grande, que no es el caso, es malo, terrible para el resto. Que, por ejemplo, darles guita a los ricos hace que inviertan menos, justo al revés de lo que creen, con una fe envidiable, los chicos de la corbatita. Durante décadas el poder se ha sustentado controlando los medios, un tipo de mi edad ha visto versos y mentiras espectaculares, cuando aparecieron carteles, con el turco puto a caballo, disfrazado de gaucho, que decían “llegó el criollo!”, nos cagábamos de la risa. Esa elección del 89 fue una obra maestra del terror, no es cierto que hubiera que saber mucho o leer mucho o ser sociólogo para advertir que el turco garca era un turco garca, que venía para empobrecer y destruir, la generación mía tenía experiencia con el “peronismo” de Isabelita y López Rega. En elección del 95 apareció un frente que tenía algo de peronismo, no recuerdo como se llamaba, hubo una interna y, tampoco recuerdo como fue, quedó de candidato un tal Bordón, al que nadie recuerda porque no hay nada que recordar, no se si no terminó yéndose con el turquito castigador. En la elección del 99 hubo una famosa tapa de la revista “Noticias” ¿se llamaba así? con la imagen de Cabeza de damajuana y Delarua que se congratulaba porque por fin el país había encontrado el rumbo y venían, ahora sí, tiempos mejores. Si hay un tipo que representa la continuidad de las políticas de la dictadura ese es Cavallo, se encargó de estatizar la deuda privada durante la dictadura ¿no es genial? Reapareció para mandarse el 1 a 1 con el caudillo riojano, los bancos te pagaban un 1% de interés mensual en dólares ¿qué puede salir mal?, reapareció, todavía otra vez, con Delarua para liderar el corralito, el megarcanje y diciembre del 2001. Después fue como una especie de consejero de Macri. Los políticos corbatistas van y vienen, se van a su casa dejando al país en ruinas pero son olvidados, en cambio los “economistas” esos son siempre los mismos, dicen siempre lo mismo, tienen todos la misma ideología y fracasan siempre igual. Pero los medios los promueven una y otra vez, a los corbatines no, a esos los putean como si no fueran ellos los que los llevan al gobierno. Por lo que yo veo hay 2 clases de votantes, en las elecciones que repasamos acá son una mayoría aplastante, los tipos de clase media que piensan que no les va a tocar, son gente con alguna clase de privilegio, propietarios de sus viviendas, dueños de algo, alguna profesión interesante o una buena posición. Después les toca pero es como que la cabeza se les trula y cosas que son evidentes se les escapan, lo cagaron ¿cómo no lo van a cagar? ¡si es un boludo de clase media del 3er mundo! Perdieron el negocio que tenían, tuvieron que vender, no sé, un depto. o el auto, se perdieron, durante varios años, las vacaciones ¡pasaron a viajar en colectivo! Yo viajo en colectivo, obvio, y les cuento, si tienen la dicha de no necesitarlo, nos parecemos cada vez a una asamblea de pordioseros. Pero no lo registra. Los pobres votan pero no les interesa, intuyen que cualquier resultado posible les va a salir en contra, incluso en el caso, posible aunque muy improbable, que sea un gobierno que los beneficie. Porque la única forma en que va a haber bienestar y libertad para los humildes y explotados varios es que los políticos de corbatita, los economistas de Harvard y los dueños de todo aborden un avión y no vuelvan. No estoy muy seguro de que no sea eso lo que está pasando en Venezuela y los hace enojar tanto.