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Con Cristina.

domingo, 28 de marzo de 2021

Nos mejicanearon. Qué carajo pasó con las vacunas de Astrazeneca.

Para empezar, todavía no entiendo como no nos están vacunando, mejor dicho, nos están vacunando con el otro significado de la palabra: dártela por el orto.

Yo les cuento por si tenemos un lector en Nueva Zelandia o recién descendido de Ganimedes, los tipos normales, clase media, clase media laburante, laburante o pobretones varios no llegamos a los 60 años “hechos unos pibes”, estamos todos más o menos con diabetes, alta presión, operaciones varias o simplemente con problemas físicos.

Los tipos de 60 que están 10 puntos son los que te jedi, los que han hecho buena guita sentados en sus sillones, la famosa “gente de bien”, bien de joder al prójimo, a los que no se puede atacar porque son los inversores, los que “sostienen” al país, la gente como uno. O, digámoslo, gente con unos genes de la gran puta, que también hay, porque no.

Le cuento, querido lector de Ganimedes, que en provincia, la matanza, González Catán, Laferrere y su ruta, están dándoles la vacuna a los mayores de 60 y que en capital, y probablemente en otros distritos gobernados por la oposición liberal, les entregaron la vacuna a las prepagas, para que se vacunen primero a los señores honestos que pagan 300 o 400 dólares por mes para tener la dudosa medicina para ricos.

De cualquier manera medio país, o más que eso, debería estar vacunado. Piensen que nuestro país ya produce la vacuna, la de Astrazeneca o como se llame, y en números de 6, 12 o más millones.

De esta mierda debería estar hablando todo el mundo, la blogosfera, los medios, las redes y hasta las viejas de barrio.

Pero no, incluso en los medios claramente alineados con el campo popular, sale chiquito, puede ser porque el gobierno popular la cagó bien cagada.

La vacuna quedó en manos de un tal Sigman o como se llame.

Supuestamente la vacuna, ya les dije 6-12 millones de dosis, iba para México y ahí, a nadie le quedó muy en claro porque.

Una vez en México, tan lejos de dios y tan cerca de ya saben quién, “pasaron cosas”, como dijera aquel gran estadista.

Resultó que los mexicanos carecían hasta de frasquitos, si he de creer a la información más bien oscura de que dispongo, y de unos filtros, no sé de qué hablan, la virología no es lo mío.

¿Cómo se solucionan las cosas en el país hermano? Mandando millones de vacunas a los states.

Esto se pone cada vez mejor.

Parece que a los states, incluso a los, es una licencia poética, progres que gobiernan ahora, les importan un carajo esas vacunas, uno especula que es porque vienen del tercer mundo, sin embargo, sin embargo, tampoco las dejan salir, tal vez, uno que es muy mal pensado, para castigar a los sudacas levantiscos.

Los yanquis y sus gobiernos más cercanos, como Bolsonaro y movidas así, quieren que la gente se muera, es la ideología: el mundo no alcanza para tanta gente y para que, los vampiros de siempre, duerman tranquilos es mejor que muchos nos vayamos a la mierda.

El gobierno yanqui viene haciendo movidas así contra el resto del mundo desde que empezó la pandemia pero no, debo ser yo que soy un espía de Kim Song Um o como se llame.

Parece que del otro lado, en México, esta ese tal Slim, por otra parte, como carajo un tipo se va a llamar Slim, que es al mismo tiempo dueño de todo, Thalia, los sombreros, Televisa, los narcos, los túneles que llevan la papusa a los states y hasta el picante.

Dicen, porque no me consta, que se puede envasar la vacuna en la argentina y que no habría que permitir que siga saliendo del país.

Los medios de la derecha ni mencionan el tema, una prueba muy fuerte de que es verdad, por cierto, para empezar demuestra que la “empresa privada” no sirve para una mierda, que son ineficientes, que mienten, que son corruptos, que tienen acuerdos secretos con los yanquis y que, finalmente, matan a la gente.

Por supuesto que lo que debería hacer el gobierno es tomar posesión de la fábrica de vacunas, suspender todos los envíos a México y donde sea y llamar de raje a todo el CONICET y ver, improvisar, comprar, pedirle la escupidera a Putin, los chinos y quien sea, conseguir los frasquitos, el filtro, lo que venga y vacunar, en la 1era acepción, medio millón de personas por día.

Pero no creo que lo hagan porque ¿Qué va a decir Sigman? ¿Larrata? ¿Clarín? ¿El canal de Macri? ¿El progresista Larreta? ¿Los radicales?

Es mejor que los boludos de siempre, que no pueden/podemos viajar a Miami para robarles una dosis a los yanquis, se mueran en silencio en el pasillo de los hospitales.

Y no me miren así porque sabemos que esto está empeorando rápidamente.

2 comentarios:

  1. M'estrañan esas dudas suyas, el camarada slim es mucho más millonario que cualquiera de nuestros próceres, incluído el quetejedi y dada la adicción a los sobres de nuestro periodismo serio, es perfectamente lógico que en lugar del tachín-tachín usual está comprando silencio y por éso no se oye nadita de nada..Con los nac&pop es más comprensible la cuestión ésa del silencio, el "compañero" sigman, si no te vende como cómplice de un choreo descomunal. te vende como pelotudo, también descomunal..... mejor poner cara de perro que lo están c....., y muditos.
    Los frasquitos, supongo que no serán tan sencillos como los de mermelada pero se podrían hacer en estas pampas, pero no me va a negar que como chamuyo son una maravilla.

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  2. Dos notas de Walter Goobar sobre el tema

    https://pajarorojo.com.ar/?p=52714
    https://pajarorojo.com.ar/?p=52794

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Piensa mal y acertarás