Tenemos mucha libertad, mucha crítica, mucho no sé qué y el pueblo va pasando de la carne al pollo, del pollo a la polenta y de la polenta a cagarse de hambre. Yo vivo en este país, en el de verdad, en un barrio cualquiera, nos están haciendo pelota y los políticos avanzados del peronismo preparan las listas para el año que viene. La campaña va a ser tremenda no tenemos nada de qué preocuparnos. Vuelve el peronismo de Perón el de Lopecito y de Isabelita, esa reina, y si no, vuelve Luder ¿se acuerdan? o ¿por qué no? el caudillo provinciano: yayora o todavía no, no sabemos. Digo los peronistas porque el resto ni siquiera figura. Ya sé, soy mala gente, yo me acuerdo cuando los troskos le cortaban, no sé, la panamericana con sus autos a Cristina. Pero debo ser yo que me contagié y estoy loco. La única vez que se movieron en serio fue a fines del 2017, cuando se votó la baja de las jubilaciones, tampoco fue para tanto, es más, creo que los despelotes fueron armados por el propio gobierno de Macri. Vi, por televisión, la marcha del otro día, ese día no apareció ningún conteiner con cascotes de una obra en construcción inexistente, tampoco apareció la brigadita a apalear a los periodistas, ni esos pibes, siempre bien vestidos porque los canas son nenes de mamá, que tiraban piedras. Lo mismo nos pasó el 24, no volaba ni una mosca ¿saben que creo que es eso? que tienen, los testigos de Conan, miedito. Si me preguntan a mí, miedo de nada porque nadie tiene la mente despejada y el tamaño de órganos que se precisan para que pase algo en serio. No estoy muy seguro de que es lo que les da cagazo. Aparentemente tienen todo. En parte puede ser que ya no creen en sus propias encuestas, pero de eso hace rato.
¿Saben quiénes son? Son los mismos que, cuando Galtieri se escondió y los milicos traicionaron al país abiertamente y lucharon hasta el último colimba, decían que no tenían apuro en que hubiera elecciones. Los viejos de mi edad se acuerdan. Después de la traición, muerte de los inocentes, la derrota y el desastre, no había ningún apuro. Son ricachones que se hacen votar después se sacan el saco, se ponen el pongo, y te cantan la marchita. Igual algunos son mejores que otros, a esta altura creo que los radicales, los lilitos que son neoradicales y esos no identificados que se nuclean alrededor de Pichetto ese estadista, son los genuinos proceres de estos tiempos. Y yayora, un líder mundial. Estoy escribiéndolo y no lo creo yo mismo.
Rodrigo de Loredo, el mendocino Julio Cobos, Karina Banfi, Martín Tetaz, Roxana Reyes, entre otros. En el caso de Hacemos Pichetto, Massot, Monzó, hasta Stolbizer, Juan Manuel Lopez, Maximiliano Ferraro de la Coalición Cívica, y los cordobeses que responden a Llaryora. ¿no es una especie de récord mundial de cretinismo? Un sistema donde está permitido votar esa clase de gente no es democrático. Es una dictadura de clase. Alguien tenía que decirlo. Se llenan la boca hablando del pueblo y de la democracia y cuando la dictadura perversa de los Caputo deja a los infelices sin remedios para el cáncer, a los comedores sin comida y a las provincias sin guita para pagarles a los maestros, se hacen los boludos y miran para otro lado. Si no fuera por apoyo del parlamento ya se hubieran ido. Porque esto es un desastre, incluso para sectores de clase media que se creían a salvo de la crisis. Un millón de personas en la calle desfilando con carteles ¿y? ¿cambio algo? ¿pasó algo? ¿va a pasar? Según la constitución el gobierno debería ser depuesto por el parlamento, por menos de lo que está pasando ahora se lo llevaron puesto a Delarua. Pero estos aprendieron, ahora tienen un parlamento circense. Hacen que un simiecillo como D*alde parezca un político. Ahora ¿cómo catzo vas a hacer para echarlos sin el parlamento? Cuando la multitud empezó a gritar que se vayan, desde el palco la hicieron callar, o a lo mejor soy yo que soy muy tendencioso, a lo mejor los universitarios y clase media varios se asustaron y se callaron la boca. Porque a lo mejor en el año 25 pasa, vaya uno a saber qué cosa y cambia todo. Los pobres con cáncer y los hambrientos y un montón de jubilados, ya no van a ser un problema porque van a estar todos muertos. Veremos dijo un ciego y se tragó un alambrado. |
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