Donde extrañamos a Macri y al inombrable.

En otros tiempos las encuestas mentían, recuerdo en el 2019 cuando daban un “empate técnico” entre el macrismo y el peronismo, se venía el ballotage, el repechaje o algo por el estilo. Y por lo menos esas encuestas venían con el tamaño de la muestra y con detalles como ser si es presencial o telefónica. En estos tiempos de tecnología avanzada las encuestas, con las que parece que decide todo o casi todo, son así al tun-tun, nadie parece molestarse en informar de donde salen o salen de grupos desconocidos o famosos por haber mandado incontables cantidades de fruta. A mí me llama la atención que se haya bajado Macri porque tenía mucha “imagen negativa”, no entiendo porque los laderos de Macri tendrían que tener mejor imagen, más vale que, con un mínimo de sentido común, Pato Bullrich, o el propio Larreta, deberían tener una imagen peor. Lo de la imagen parece más bien un pretexto ¿Por qué se bajaría un loco de atar ambicioso de una candidatura? Porque los mandamases de verdad le dijeron que no. Supongo que los “empresarios de la embajada” no lo quieren al bueno de Mauricio. A la hora de la verdad los dueños del país analizan las cosas bastante parecido a los que estamos de este lado. El gobierno del gato no terminó con el helicóptero porque le dieron esa culada de guita, el préstamo del FMI no fue para que ganara las elecciones que ya estaban perdidas, fue para que llegara al final del mandato. Los planes de la oposición no se mueven de lo que hizo Macri y de lo que vienen haciendo desde Martinez de Hoz en adelante. Al final el único presidente de la derecha que se fue más o menos bien fue el innombrable. Por eso, desde el lado de los ultras-ultras están rescatando al turco puto. Para empezar el “peronismo” de derecha todavía existe pero no figura demasiado en ningún lado, por eso Larreta tiene que inventarse alguna clase de “movimiento” para incorporar a Schiaretti o como se llame, por cierto que al cacique cordobés le está llegando la hora del retiro. De entrada, casi diría los 2 primeros años, la derecha peronista acompañó a Macri, teléfono para Massita, después decidieron que habían llegado a la puerta del cementerio y se fueron alejando. El espantajo riojano tuvo su cuarto de hora, ajustó, consiguió guita privatizando, todavía vivimos con la luz cortada gracias a esa “hábil maniobra”, destrozó el tejido industrial del país y dejó 20 puntos de desocupación. Y ese es el que se fue bien. Para seguir con las encuestas, lo muestran, por dar un ejemplo, a Milei ganador en 1era vuelta pero, al menos por ahora, no digo ganar pero no hizo una, una, elección decorosa en ningún lado. Podría llegar a existir si los macristas “línea fundadora” (o fundidora, quien sabe) se vienen abajo y el chiflado recibe los votos del resto de la derecha. Pero los macristas no están en esa situación, opino, no es una verdad absoluta de nada, que Pato no existe, en todo caso compite por el lado de la extrema derecha. El único razonablemente competitivo es el Pelado, tiene a los radicales, tiene a Lilita y lo que queda del PRO. Incluso, no se a esta altura en que quedó, andaba en charlas con el “peronismo” de la derecha. En una época, creo, espero no meter la pata, que Perón decía que los peronistas eran como los gatos: cuando se peleaban era que se estaban reproduciendo. A lo mejor, peor en este caso, es lo mismo con la derecha y si aparecen variantes que se hacen sombra es porque están creciendo. Ademas la campaña todavía no empezó, puede ser que frente al hecho de que les van confiscar los depósitos en el banco y hacer una hiper-recontra-ultra devaluación una parte de la clase media se niegue a votarlos. Puede ser que las buenas elecciones que el peronismo está haciendo en las provincias se reflejen en las presidenciales. Puede ser que termine por ganar Larreta y haga el shock que prometen, el único resultado posible del shock es lo que ya sabemos, un golpe de estado maquillado.