A veces puede pasar que el árbol no deje ver el bosque. Reconozcamos que la persecución delirante contra Cristina es un árbol gigante. Yo escucho decir a muchos cumpas peronistas que es la “locura del odio”. No es locura de nada, es el imperialismo. De la misma forma que nos trajeron las dictaduras de los 50-60-70 nos traen la audacia, la desvergüenza, de la “justicia independiente”. Hace unas horas Cristina nos recordaba los lazos “familiares” y de negocios entre los intachables fiscales de la democracia y los monstruos de la dictadura. Nada nuevo bajo el sol, a Perón, a miembros de su gobierno, a civiles que solamente eran conocidos peronistas, hace más de 65 años le hicieron juicios, les embargaron las propiedades, los proscribieron y los metieron presos. Si revisan los apellidos son más o menos los padres y los abuelos de los que están armando la farsa jurídica de ahora. Si revisan lo que pasa en los otros países latinoamericanos es la misma milonga. Se podría decir que es el colmo del desprecio aplicar mecánicamente el mismo plan a 20 países diferentes. En los buenos tiempos existía una llamada “escuela de las américas” donde formaban milicos asesinos y torturadores varios, no era tan popular en Argentina donde existía una escuela “antisubversiva” basada en criminales franchutes que habían estado torturando prisioneros y masacrando familias en Argelia. La escuela ahora se dedica a “formar” jueces y fiscalitos varios, no sé cómo se llama, “usar la ley para cometer crímenes” supongo. Debería haber 2 bandos y el apoyo a Cristina debería traerle popularidad al gobierno que, a su vez, debería aplicar una serie de medidas “populistas” que amargaran al departamento de estado. Pero las cosas son un poco más complicadas. El ajuste sigue. No sé si se enteraron, es de interés nada más que de la clase media, los que hayan pedido subsidios para la luz y el gas no van a poder comprar los dólares que se podían comprar por homebanking. Si ya se, me van a repetir lo mismo que yo pienso, pediste subsidio para pagar la luz y queres comprar dólares, etcétera. El problema no es la incoherencia de la clase media, el problema son los votos del medio pelo. Hay, no sé, periodistas, comentaristas, opinadores varios que hablan del ajuste como que “va a venir!” o como “se acerca!” y hace no menos de medio año que los salarios, jubilaciones e ingresos varios vienen bajando. Desde ya aclaro que la respuesta, un mínimo de cordura, está solamente en el peronismo. Los economistas de la derecha no ofrecen más que desatinos, se quejan del déficit y al mismo tiempo quieren aprobar rebajas de impuestos para los ricachones en el parlamento. Es razonable prever que un sistema donde tan poca gente tiene tanta representación, los macristas tienen la mitad de la cámara de diputados y representan a menos del 1 % de la población, está condenado y a no muy largo plazo. |
acertado como siempre, cumpa. lo leo mucho, o sea, leo lo que usté escribe, que no es mucho, pero sustancioso. coincido que el plan de la derecha es más hambre. lo que todavía no aparece es el plan nuestro, y el que aparece, parece más de derecha que nuestro. lo mismo, coincido con usted que es una etapa de ésta lucha, ya iremos resolviendo los tantos según cómo vayan saliendo los dados!
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