La historia se repite inexorablemente: ¡la Shegua echó de la plaza a los Randazzoneros!

No me voy a poner a contar toda la historia de nuevo pero, como si fuera una de esas tesis en las que se recrean los estudiosos (?), podemos afirmar que los progres, no digamos la izquierda, somos pocos. A veces nos parece que somos muchos porque, que otra cosa vamos a hacer, nos juntamos entre nosotros, la blogosfera está llena de relatos de cumpas peleados con toda su parentela. A todos mis amigos progres les toca siempre, desgracias de la vida, una parentela, compañeros de laburo, vecinos o lo que sea, de derecha. Así como digo y sostengo que los progres somos 4 también digo que a Randazzo lo midieron, lo midieron varios, antes y después de que quedara como único candidato, y no le daba, no me pidan cifras ¿Qué soy yo? ¿Artemio López? Si Randazzo competía como “el único kirchnerista puro” y perdía más o menos por paliza ¿Cómo les parece que quedaba el kernerismo? Como el culo, quedaba. Y me es muy difícil entender que era lo que ganaban, los honestos militantes de la Cámpora, perdiendo una elección por escándalo. El asunto es más grave todavía porque una derrota de ese tipo se la dejaba servida para que el motonauta se deshiciera de todos los kerneristas y afines. ¿Cómo se llama eso? Efecto “rebote”, “resaca” o algo así. En esta situación el manquillo quedó mucho más entornado. Lo que, por cierto, no es garantía de nada. No estoy en condiciones de decir si Randazzo se equivocó, si no hizo las cosas suficientemente bien o si no había más remedio, yo no tengo información más allá de rumores o de la blogosfera, y tal vez me equivoque, pero ¿Dónde estaban los gobernadores, intendentes, dirigentes sociales, sindicalistas y demás que deberían haberlo acompañado? Por lo que me pareció estaban o bien neutrales o bien con el manco. Podemos, es gratarola, especular sobre que hubiera pasado si, contra todos los pronósticos, Randazzo ganaba las PASO ¿Cuántos votos de Scioli hubiese conservado? Además no parece tan fácil, a pesar de la ayuda que siempre da la oposición, ganar sin los gobernadores y etcétera. Y por último queda la posibilidad final de que ganara la presidencial y tuviera que gobernar sin los gobernas. Y teniendo que bancarse la oposición “tierra arrasada” que se tuvo que bancar la Shegua. La tesis de que no importa el resultado de las elecciones porque “después volvemos” es disparatada, entre Cámpora y Kirchner pasaron 30 años. Da la impresión de que “el proyecto” como les gusta decir a los compañeros kerneristas acumuló más enemigos de los que puede racionalmente enfrentar. Tampoco es cierto que los haya buscado, para los que conocemos las historias antiguas, Perón nunca buscó un “mano a mano” con los yanquis, del mismo modo que Nestor Kirchner nunca buscó enfrentarse con Clarín. Entre otros motivos si Clarín hubiese hecho la campaña que hizo en el 2008 en el 2005, a Kirchner, le hubieran dado una patada en el culo. Parece que se viene en serio una etapa de “defender las conquistas”, cuando un barco va a atravesar una tormenta se deja todo atado, la ley de reajuste de las asignaciones universales es para ese lado. La continuidad es lo contrario de la ruptura. Supongamos, no cuesta nada, que nuestra pampa salvaje consigue mantener los próximos años los números que tiene ahora, lo que llamaríamos no chocar la calesita ¿Estaría tan mal eso? Porque eso es lo que se está planteando, las grandes reformas, justicia, impuestos, medios monopólicos, sistema financiero y bancario, participación obrera en las ganancias, fin del trabajo en negro y de la tercerización, y muchas otras cosas más quedan para un futuro lejano. Políticamente es muy difícil mantener el interés de la gente y la participación sin grandes reformas a la vista. En algún sentido y más allá de si mismo Randazzo era un candidato de ruptura. El motonauta vendría a ser la continuidad pero sin la nobleza y la imaginación de la Shegua y sus potrillos. Pero a Randazzo no le daba el cuero. Y la mejor demostración, no se como se dice, ex post facto de la inutilidad de Randazzo es que renunció, en nombre de una consigna difusa, a ser candidato a gobernador de la PBA y ganar por aplastamiento. Entre un tipo que pone su ego por encima del interés colectivo y el manco ¿Cuál es la gran diferencia?