Rusia abandona la guerra mundial, para pelear su propia guerra. Febrero 1918. Brest Litovsk, el frente.Por muy extraño que le suene a un lector del siglo XXI la idea principal de los revolucionarios no era la revolución en Rusia o un alzamiento campesino. Los revolucionarios en su mayoría habían conocido el exilio, Lenin, y la mayor parte de su estado mayor en 1918, hablaban alemán fluidamente, varios hablaban francés, ingles y vaya uno a saber que. El partido de los bolcheviques pertenecía a la internacional socialista y tanto ellos como los mencheviques habían armado sus partidos a imagen y semejanza de los socialdemócratas alemanes. Veían a la revolución rusa como el comienzo de la revolución mundial. ¿Cómo iba a ser esa misteriosa "revolución universal"? Se extendería desde la Rusia atrasada a la Alemania industrial, los revolucionarios alemanes, que en realidad eran Liebknecht y Rosa Luxenburgo más un grupito que los seguía que ni siquiera era un verdadero partido, derrotarían al Kaiser, a los militares, a los capitanes de la industria y a los socialdemócratas de derecha e instaurarían el soviet. Cuesta creer que tipos formados políticamente, que conocían el país y habían vivido años en Alemania pudieran creer realmente una boludez como esa. No solamente eso sino que los franceses, los ingleses y los demás países europeos harían más o menos lo mismo. Un motivo para el optimismo era que los principales países capitalistas estaban enfrentados entre si. Los soldados rusos, que se habían retirado derrotados del frente, estaban llevando la revolución a todas partes de Rusia, no era extraño pensar que podían llevar la revolución hasta otros países, cosa que hicieron durante los primeros años de la república socialista. La base de la confianza de los revolucionarios rusos en la revolución mundial, europea por lo menos, era el descontento de los soldados de las trincheras. El descontento, la furia, la desesperación, si lo prefieren, era evidente en los cuerpos de ejército europeos que tenían que marchar a operaciones militares desastrosas que terminaban en masacres, los civiles de la retaguardia podían morir de desnutrición pero, en el mejor de los casos no tenían armas ni organización para rebelarse y tampoco tenían al partido de Lenin que funcionara como vanguardia. Tres semanas después de octubre, Trotsky se comunicó con el alto mando alemán para iniciar las negociaciones de paz. Empezó la famosa negociación de Brest-Litovsk. Los rusos se tomaron el asunto como una farsa, aparte de Trotsky, Joffe y Kamenev llevaron representantes obreros, campesinos, dicen las malas lenguas de la derecha que era un campesino que encontraron por el camino, y, horror de los horrores, hasta una mujer. En seguida se pusieron de acuerdo en un alto el fuego. Los rusos ya casi no tenían ejército, los campesinos se desmovilizaban solos y se iban a su casa, después volvemos sobre eso, los alemanes querían terminar la guerra en el este para hacer un "ataque final" en el oeste. Si los revolucionarios rusos eran fantasiosos los príncipes y generales alemanes era simplemente estúpidos, esperaban ganar una guerra moderna con buenos generales y soldados sacrificados contra un poder económico infinitamente superior. Aun así no había motivo para no firmar una paz rápida, darles a los alemanes algunos territorios que querían, básicamente dejar que se sintieran vencedores, y conservar la línea del frente de noviembre de 1917. Tal vez un poquito más. Pero, en parte, al menos, a instancias de Trotsky empezaron a darle largas. Exigieron que se invitase a los otros países en guerra y cosas para hacer tiempo esperando que la rebelión estallara en el ejército alemán o en quien sabe donde. Trotsky les hacía discursos interminables a los alemanes que veían que era una táctica dilatoria y empezaron a perder la paciencia. Los alemanes que, a pesar de su intrínseca estupidez, eran muy vivos firmaron una paz separada con Ucrania, los "nacionalistas" ucranianos pensaron que era mucho más nacionalista convertirse en un protectorado alemán que vivir bajo el gobierno de sus propios soviets. En octubre (del 17) el soviet de Kiev se alió con el parlamento ucraniano contra los liberales y los SR para asegurar la autonomía pero de inmediato hubo guerra entre la "república popular" ucraniana y el soviet. En Ucrania los rusos vivían en las ciudades y eran como un ocupante colonial, los ucranianos eran campesinos, la burguesia de los campesinos era la base del nacionalismo, los obreros de las ciudades eran la base del soviet, a su vez los judíos eran mayoría en muchos pueblos. En cuanto uno lee la proclama del parlamento ucraniano de octubre del 17 parece calcado de los decretos de los soviets pero mientras se usa un lenguaje radicalizado el parlamento apoya a los blancos. Cosas de la política. Para mediados de enero los grupos armados rojos que había por todas partes derrocaron al gobierno del parlamento ucraniano pero poco después intervinieron los franceses. El parlamento tampoco tuvo problemas en llamar a los alemanes y convertir a Ucrania en un vasallo alemán, ¡ay! estos nacionalistas. El 8 de enero de 1918 se reunió el comité central de los bolcheviques. La fracción mayoritaria era la de Bujarin, partidaria de la hacerle la guerra a los alemanes con un ejército guerrillero, La segunda opción era la, típica, de Trotsky: no firmar un tratado de paz pero tampoco hacer la guerra en espera, aparentemente, de que estallara una revolución en Alemania. Lenin quedó en absoluta minoría con su propuesta, ciertamente poco glamorosa, de firmar cualquier cosa con tal de no ser invadidos, lo seguían Stalin, Sverdlov y un par de pibes más. Los leninistas apoyaron la propuesta de Trotsky y durante 3 semanas más siguieron haciendo tiempo en Brest. El día 9 de febrero el Kaiser les mandó un ultimátum, o firmaban la paz en 24 hs o los alemanes invadían la Rusia soviética. El 18 de febrero avanzaron. La república socialista tenía grandes discursos pero estaba indefensa, en una semana ocuparon 300 Km. ante un ejército que huía. El día 2 de marzo los alemanes bombardearon Petrogrado. En el comité central la moción de Lenin de firmarles lo que sea a los alemanes perdió por 6 a 7. Trotsky terminó por cambiar su voto y permitir la firma. El motivo de este cambio parece ser la amenaza de Lenin de renunciar, en realidad si los alemanes seguían adelante no había mucho a lo que el pelado pudiera renunciar, la posición de Trotsky, en ese caso, hubiese sido precaria. De inmediato Lenin mandó un telegrama pidiéndole la escupidera a los muchachos del Kaiser que, ya que estaban en el baile, siguieron avanzando sobre Rusia unos días más. El 20 de febrero los partidarios de la "guerra revolucionaria", Bujarin, Uritski, Piatakov, renuncian a sus cargos. El día 21 los comisarios proclaman a "la patria socialista en peligro" es una llamada a la movilización general, a destruir los puentes y a impedir que los alemanes puedan abastecerse, entre otras cosas les da a los soviets la "licencia para matar", cualquier saboteador, acaparador, cualquiera que ayude al ejército blanco o cosas por el estilo puede ser fusilado en el acto, sin juicio previo. La prensa derechista, que haga propaganda por los alemanes o simplemente sospechosa es prohibida sin más vueltas. El ejecutivo del soviet vota 116 a 85 a favor del tratado. Se acaba de abrir una herida entre los SR izq. y los bolches que ya no va a cerrar. Los bolcheviques reciben cartas de los aliados que afirman estar dispuestos a apoyarlos si van a la guerra. Los bolches conocidos que van a firmar la paz desastrosa a Brest son Chicherin y Ioffe, ambos van a estar al frente de la política exterior del soviet en el futuro. Los delegados de la república socialista firman lo que les dan sin ningún tipo de diálogo o discusión. El tratado prohíbe al soviet meterse con lo que pase en el occidente: Finlandia, el báltico, Polonia, deberá reconocer a Ucrania, abandonar territorios ocupados e indemnizar a los imperios alemán y austrohúngaro. Se intercambian prisioneros. Aún una vez firmada la paz el avance alemán siguió hasta el Don, Crimea y el caúcaso. Es el 3 de marzo de 1918 y lo peor todavía está por verse. |
Artículos anteriores:
1.Con el Zar estábamos de fiesta, estábamos..
2.Los 4 zurditos de siempre.
3.El ascenso revolucionario.
4.La revolución en el descenso.
5.El país oscuro.
6.El retorno.
7.La guerra es el mejor negocio, 1914.
8.La retirada interminable
9.La revolución de febrero
10.Lo que dejó la revolución de febrero.
11.Lenin, el mismo, en Rusia.
12.La renuncia del ministro liberal
13.La gran ofensiva desastrosa
14.Semi insurrección semi bolchevique
15.El golpe de estado
16.Infiltración bolchevique
17.El Comité Militar Revolucionario contraataca
18.Del palacio de invierno al congreso de los soviets
19.El 25 de octubre
20.El nuevo gobierno
21.La batalla de Moscú
22.La despedida de Kerenski y la derecha SR
23.El poder a los soviets
24.La elección de la constituyente
25.El fin de la constituyente
26.Se proclama la República Socialista
Rebeldes sin escrúpulos traicionan a los aliados que luchan contra el Káiser.
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