jueves, 19 de noviembre de 2009

Marcelo, agachate y conocelo.

El país es chico. Es un pañuelito. Y yo lo conocí a Tinelli. Era amigo de un compañero mío de la primaria.

Este pibe, del cual no voy a dar el nombre porque, que yo sepa, no tiene nada que ver con esto, era hijo de unportero del barrio, loco por el fútbol. Tinelli, que vivía ya en capital, o lo traían, quien sabe, jugaba a la pelota con nosotros. Durante una buena parte de la década del 90 no tuve televisor, tampoco en los 80, ya que estamos. Aun así recuerdo haber visto, algún domingo, la década del 80 fue triste, a Tinelli, un poquitin patético, hablando de fútbol en el programa ómnibus, contaminaba el aire y te atropellaba, de Badia. Después relataba partidos de fútbol, igualmente lamentable.

Después algo pasó. Un buen día lo vi, una mujer me había dejado y estaba solo, de noche, al pedo, en la casa de mis viejos, y Tinelli tenía un programa como deportivo o algo así. Todo el mundo, salvo los cuatro zurdos bebedores de siempre, hablaba de los "bloopers".

Si no vieron la película, consíganla, no se como se llama. Es una película cómica de ciencia ficción donde un tipo es puesto en hibernación y despierta 500 años después, toda la humanidad está compuesta de retardados. El deshibernado es el último tipo con un mínimo de sensatez. El programa de televisión que ven en ese futuro de imbéciles se llama algo así como: "Ay! Mis pelotas!" y se trata de un tipo que se cae, se tropieza, se pega, se le cae algo, lo chocan y siempre, pero siempre, le embocan en los huevos.

Sin embargo, recuerdo haber defendido a los "bloopers" me parecían una forma de revelar que la tele es un entretenimiento y que, de ningún modo debe ser tomada en serio. En los albores de los 90, Tinelli, Marce, todavía no era el eje exclusivo del programa, estaban unos payasos, dicho sin un tono peyorativo, digamos que eran cómicos de segundo orden, y hasta había cuadros humorísticos guionados. Era ciertamente un programa barato en todo sentido pero también un programa que reflejaba el humor y los vaivenes porteños. Además me parecía, seguía sin televisor y lo seguía en la pizzería, que el humor no era ni xenófobo, ni sexista ni ninguna otra de las calamidades de las que los zurdos solemos estar en contra. Lo más retrogrado del programa era la presencia, inexplicable, de unos personajes, también escapados de la película del mundo de boludos, que pretendían ser cantantes o vaya uno a saber que. Por esa época el programa, saturado ya el rubro blooper, empieza con las cámaras ocultas. Ideológicamente es una debacle, burlarse del miedo, el estupor y el enojo de señoras de barrio no es gracioso. Es de malparidos.

La forma en que Tinelli parece haberse llenado de guita en esa época no está clara. Es muy posible que tenga unos cósmicos agujeros negros de contabilidad. Pero el propio Tinelli me seguía cayendo bien, sobre todo por no estar muy enterado de lo que hacía. Hasta que para el 95 salió haciéndole campaña a M*em. ¿Por qué lo hizo? Pese al carácter, casi patológicamente pasatista, de sus programas a Tinelli se le conocían declaraciones razonables, cercanas al progresismo. Es posible que sus cuentitas en negro le hayan dado a los tiburones m*mistas la palanca para esclarecerlo sobre las bondades del prócer riojano. Es posible que fuera sensible a las presiones del multimedio, no me acuerdo de quien, en particular, era ese canal pero seguro que era de algo como Clarín-Vila-Manzano su ruta. La tercera posibilidad, y la más inquietante, es que Marce identificara su propio suceso con el régimen m*mista, que realmente pensara que, como a él le iba bárbaro, todo era una maravilla. En ese caso es seguro que no está solo.

Cuando llegó el 2001 Marce acompañó desde su programa la destrucción mediática de Delarua. Lo sé porque me lo contaron, en el 2001 tenía televisor pero era un tipo feliz y ni me acercaba a la tele. Lo interesante es que el aplastamiento de Delarua es simétrico a las "vivezas" y corruptelas del m*mismo. Es una forma de ocultarle a la gente el fracaso de la economía de mercado en general y de la variante neoliberal en particular. Delarua se hundió porque era bobo y M*em por chorro pero La Nazion, los economistas de FIEL, la fundación mediterránea, el FMI, el banco mundial, la sociedad rural y los señores feudales de las provincias no tuvieron nada que ver.Delarua jura y perjura que, a él, lo echó Tinelli. Algo me dice que pronto vamos a oír a tipos como Berlusconi decir lo mismo, adaptado al caso, claro.

Desde el 2001 en adelante todo lo que se sobre los programas de Marce es que se dedica a mostrar tetas y culos. Lo que nos remite de nuevo a la película de la utopía de los nabos. Además de "Ay! Mis pelotas!" la película más famosa se llama "Culo" y se muestra un ojete durante dos horas y media.

Sin embargo ninguna de esas maniobras, ilegales, ilegítimas y deleznables, se comparan con la campaña de "Gran Cuñado" 2009. No cabe duda de que, el "inocente" programa de Marce, definió la elección en provincia. (Ver: http://elhombre3.blogspot.com/2009/07/la-derrota-k-un-detalle.html)No es cierto que sea lícito hacer propaganda de cualquier clase usando cualquier medio. De por si los oligopolios ya han sido ilegalizados. La propaganda solapada, manipuladora, sucia está prohibida. O al menos debería estarlo.El "Gran Cuñado 2009" fue creado con la expresa intención de vengarse de los Kirchner. Nos preguntamos que le hicieron los pingüinos a Tinelli porque, que yo sepa, no le mandaron ni la AFIP. Cosa que, por cierto, sería buen momento para hacer. Total Tinelli tiene, siempre ha tenido, todo en regla ¿No?

Ahora resulta que Marce se nos ha vuelto especialista en seguridad. El individuo chistoso y socarrón se nos ha vuelto un príncipe de la paz. Un culoroto que apoyó a un régimen violento, ¿O nadie se acuerda de la represión, de los muertos, del diputrucho para privatizar el gas?, resulta que es una blanca palomita.

Me vino a la mente otra película. Me preguntó si Marce la vio. Me vino a la mente la película "Citizen Kane". Marce sería la versión tercer mundo berretex del tal Kane. Demagogo, manipulador, autoritario. Recontramillonario que compra mujeres como si fueran ganado.Todo el mundo recuerda el final de la película. Pero yo recuerdo las escenas antes del final. En esas escenas Kane recorre una mansión inverosímil de inmensa. Es como una pobre rata sola paseándose en la nada.Y otra cosa más, Tinelli jugaba bien al fútbol pero nunca ganaba. Jugaba para él solo.

Rinti: "Nunca usé doble de cuerpo, cuando hice "El bueno, el malo y el perro" era yo el que saltaba de la casa incendiadose, hasta se me quemó la cola"

rr

Con Macri nos están haciendo la jugarreta de siempre. Está bien que lo de los "espias" es fascismo pero no olvidemos que se trata de uno de los peores gobernantes que se han visto en este país, lo que es mucho decir.

¿Y donde está Michetti?

Justicia islámica y mutilación genital para Arjona.

4 comentarios:

  1. La película del hombre que hiberna 500 años se llama IDIOCRACIA. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia...

    ResponderEliminar
  2. Otra vez buenísimo.
    Yo creo que en los 90 cualquiera podía encontrar algún rinconcito desde el cual podía parecer progre. No nos olvidemos: por aquel tiempo, en la mente de mucha gente (i.e.,la mía, púber pajerín) el progresismo estaba dentro del radicalismo. Y Magdalena y Nelson Castro eran tipos que parecían progres. Y, sin llegar a tanto, Mirtha no parecía tan facha: podía esconder lo que pensaba porque se sentía cómoda, no tenía de que quejarse ni opinar.
    Marcelito en aquellos tempranos 90 construía su emporio: chupaba las bolas de cuanto gil hubiera, y si bien es cierto que se mostraba como menemista, no nos olvidemos la cantidad de gente que lo hacía: no se porque, me acuerdo de Navarro Montoya, y de Maradona.
    Pero Marcelo también hacía joditas con el Chacho y Bordón.
    Es que lo interesante era reírse, no pensar, boludear y boludizar la vida. Esa era la norma cultural noventista: reir como idiota a cualquier precio, pasara lo que pasara, y si había que ponerse serio, no tanto como para cuestionar el "modelo", es c'est a dire: el 1 a 1 y el liberalismo.
    Tinelli es una expresión paradigmática de la cultura noventista. Ahora lo es de la restauración conservadora.

    ResponderEliminar
  3. Vos tal véz conociste el "Rosebud" de Tinelli.
    Si podés fijate que te parece la juntada que se está armando en mi blog

    ResponderEliminar
  4. Muy impactante lo que escribiste... Tiene 2caras...

    ResponderEliminar

Piensa mal y acertarás